"No conocen a Almudena Grandes, que es mediática, a Manuel Rivas ni de coña"

SU nombre está con los de Luis Landero, Manuel Rivas, Emilio Lledó o Iris M. Zavala. Juan Carlos Sierra (Úbeda, 1972) interviene en el XII Congreso de la Fundación Caballero Bonald. Es director del IES Pésula de Salteras.

-¿Conoce a Caballero Bonald?

-Me lo presentó mi amigo Jesús Fernández Palacios en el restaurante El Faro de Cádiz. En el grupo estaba también la ya ex ministra Bibiana Aído.

-¿Marca ser paisano de Sabina y Muñoz Molina?

-Y de Zahara, una cantante que hizo el tema de la Vuelta Ciclista del año pasado. Tiene canciones mejores, sobre todo una que grabó con Love of Lesbian, un grupo que siempre llevo en el coche.

-Hiperión le publicó 'Los lunes, poesía'. ¿Cómo surge la idea?

-Estudié Filología en Granada. Iba para Inglesa, pero me pasé a Hispánica. En segundo de carrera a mi grupo nos daba Miguel D'Ors y el otro tenía a García Montero. Una compañera y amiga de este grupo me contó que Luis en sus clases siempre leía algún poema para que lo comentaran. En cuatro años de profesor en Melilla lo puse en práctica. Los lunes empezábamos las clases leyendo poemas. En Cádiz lo mantuve. A Hiperión le gustó la idea y la selección y lo publicó.

-¿Les dice que poesía eres tú?

-Prefiero la contra-orden poética de Ángel González más que el becqueriano y empalagoso poesía eres tú, con todos los respetos para Bécquer, que tiene miga.

-Fuera del aula, ¿cuajó la idea?

-No soy ingenuo. Sabía que entre los profesores, entre los alumnos, entre las familias, se podía ver como una forma de perder clase. Si hablamos de educación sentimental, los finlandeses serán unas máquinas haciendo fórmulas de algoritmos -alumnos del instituto visitaron una mina finlandesa en una iniciativa cultural de Cobre Las Cruces-, pero desde un punto de vista emocional están muy faltos.

-¿Se ven los resultados?

-Depende. Tuve un cuarto que era magnífico académicamente, pero costaba sangre, sudor y lágrimas meterlos en esta historia. Cerrábamos el libro de poemas y abríamos el de texto. Otros respondían mejor. Llegan el lunes muy temprano, tras el fin de semana. Tienen cosas que contarse, con el sueño que gastan. Es una manera de calentamiento. La poesía les lleva a hablar de amores, de celos y tienes que sacarlos de ahí para meterlos en la subordinación sustantiva del sujeto.

-¿Por qué dejó Filología Inglesa?

-Por la Literatura Española más que por la Lengua. En Úbeda tenemos un ramalazo anglosajón. Sabina vivió en Londres y Muñoz Molina dirigió el Instituto Cervantes de Nueva York. Mi hermano mellizo, Luis Antonio, sí se decantó por la Filología Inglesa. Ha publicado algo sobre Irlanda y es profesor de Inglés en Parla.

-¿Leen el Poema del Mío Cid en el pueblo del torero El Cid?

-Directamente no se pide El Cid. El torero es el personaje más famoso de Salteras. El más mediático, porque en fama y trascendencia le supera Emilio Lledó.

-Lledó y usted en el Congreso Caballero Bonald. Salteras va a estar muy bien representada...

-También está Antonio Rodríguez Almodóvar, que tiene en este pueblo un colegio con su nombre. A Lledó lo conoceré en el Congreso. Vino a Salteras a inaugurar una biblioteca con su nombre y estuvo en el instituto dando una charla. No pude verlo, estaba de viaje de estudios con los de cuarto por la Costa Brava. Me pilló haciendo tirolina y orientación por el bosque.

-¿Qué es más rentable, la enseñanza o la poesía?

-En el programa del Congreso me titulan de poeta y escritor; no soy ni lo uno ni lo otro. El primer sueldo no lo gané con la poesía ni con la enseñanza, sino con el fútbol. Se lesionó el segundo portero del Úbeda, yo jugaba en los juveniles y estuve a punto de debutar en Tercera. Fui convocado dos partidos. Gané seis mil pesetas por ganar en Vera y otras dos mil por el triunfo en casa contra el Torremolinos. Tuve dos esguinces de tobillo y lo dejé. Los vestuarios en Tercera dan para un cuento, una novela y hasta una trilogía.

-¿Alguien propuso un programa de los martes, matemáticas?

-La enseñanza es una guerra de guerrillas, cada uno hace la guerra por su cuenta.

-Al Congreso va Manuel Rivas. Sus alumnos conocerán mejor a su hijo, el actor de El Internado...

-No hay color. Uno de los poemas que leí fue Miércoles, día del espectador, que Luis García Montero le dedica a Almudena Grandes. Les hablé de los dos, de su romance en los cursos de Baeza. Que no conozcan a García Montero lo entiendo. La poesía es de minorías. Pero que no conocieran a Almudena Grandes me llamó la atención. Es una escritora mediática. Su novela Inés y la alegría la tenemos hasta en la sopa. Y no te hablo de alumnos de ESO, sino de bachillerato. O sea, que a Manuel Rivas ni de coña. Uno de los problemas que tenemos los profesores es que damos tantas cosas por sabidas en los alumnos. En otras, nos dan sopas con hondas.