La Audiencia Provincial de Sevilla ha rechazado la declaración de nuevos testigos que había sido solicitada por el abogado de los padres y del hijo de Laura Cerna, la norteamericana de 49 años de edad que fue asesinada y descuartizada el pasado mes de agosto de 2010 en una vivienda de la barriada sevillana del Tiro de Línea a manos supuestamente de Antonio Gordillo, en prisión desde el mes de septiembre por un delito de homicidio doloso.  

En este sentido, fuentes del caso han informado de que, en un auto emitido este mismo mes de abril, la Sección Tercera de la Audiencia Provincial ha rechazado una serie de testificales solicitadas por el letrado de la familia, entre ellas la de la supuesta novia del imputado, que había sido interesada de cara a "confirmar si el encartado fue a Chipiona (Cádiz) el día 30 de agosto -cuando supuestamente ocurrieron los hechos-, y si es así, si le contó algo de lo ocurrido, si le vio drogado o anímicamente bajo y si se deshizo de alguna bolsa y en qué lugar". 

Pues bien, según han indicado las mismas fuentes consultadas, la Audiencia Provincial considera que estas testificales, así como el resto de pruebas solicitadas por el abogado de la familia de la ciudadana norteamericana, "no son necesarias para la fase instructora", que está siendo desarrollada por el Juzgado de Instrucción número 18 de Sevilla, el cual se encuentra a la espera de que le lleguen los resultados de un informe toxicológico. 

El abogado de los padres de Laura, José Estanislao López, recurrió en apelación a la Audiencia Provincial después de que el juez de Instrucción número 18, Óscar Sáiz, rechazara la prácticas de una serie de pruebas en un auto en el que aseguraba que las investigaciones "han encontrado, prácticamente, todos los elementos del crimen" de la norteamericana de 49 años, como son "el quién, el cómo, el dónde, el cuándo y el por qué", han apuntado las mismas fuentes.

Así, el juez rechazó la declaración de la supuesta novia de Antonio Gordillo al considerar que "si fuera pertinente y necesaria para la causa, ya se habría producido, lo mismo que, habiéndose producido el crimen, nos es indiferente si viajó o no a Chipiona". "No hay ningún indicio que permita afirmar que el imputado se desprendió de efectos o instrumentos del crimen en Chipiona, puesto que las investigaciones han encontrado, prácticamente, todos los elementos del crimen, quién, cómo, dónde, cuándo y por qué", apostilló. 

Declaración de albañiles

En esta línea, relató que "por el testigo principal", un amigo al que Antonio confesó los hechos, "sabemos los pasos del imputado tras cometer el crimen y cómo no había comentado nada a nadie, excepto al propio testigo, que lo puso en conocimiento policial inmediatamente, y que estuvo con él en las horas y días inmediatamente posteriores al crimen", y agregó que este "es un testimonio de gran valor por su exactitud y verosimilitud", concluyendo que "preguntar a los conocidos del imputado cuestiones que ya constan en la causa es absurdo y redundante". 

También rechazó el juez que se remitiera un oficio al Grupo de Homicidios para que investigara si en el inmueble del Tiro de Línea donde se produjo el crimen algún vecino oyó ruidos en el piso del imputado, así como tomar declaración como testigos a los albañiles que encontraron el día 13 de septiembre un bolso-monedero con documentación de la víctima en el tejado de la casa que estaban rehabilitando en la calle Escudero y Peroso número 13.