El Ayuntamiento rescata las cámaras del Plan Centro tras cuatro años sin uso

El Ayuntamiento de Sevilla reutilizará las cámaras de tráfico del Plan Centro, que han estado cuatro años sin uso. Los equipos de filmación se emplearán única y exclusivamente para las tareas de control y regulación del tráfico, y no para restringir el acceso de vehículos privados al casco histórico. "Partimos de cero, tenemos que utilizar las instalaciones que existen en la ciudad y ya era hora, porque durante cuatro años no se han podido ver aquí las imágenes tomadas por estas cámaras", aseguró ayer el delegado de Movilidad y Seguridad, Juan Carlos Cabrera, durante una visita al nuevo centro de gestión de la movilidad de la Jefatura de la Ranilla.

Cabrera dejó claro que el Plan Centro de Alfredo Sánchez Monteseirín está enterrado y que las cámaras que entonces se instalaron para restringir el acceso al casco histórico de los coches particulares sólo se usarán para obtener imágenes sobre la densidad de la circulación y para conocer el estado real del tráfico en cada punto, de cara a poder desviar el transporte público o cortar calles en caso de aglomeraciones como las que, por ejemplo, se prevén hoy con la Cabalgata de los Reyes Magos.

Las cámaras se quedarán también donde están, pese a que se especuló con la posibilidad de que fueran trasladadas a otras zonas. En estos días, los técnicos están revisando si los dispositivos funcionan y si sufren alguna avería que pueda repararse, para que puedan sincronizarse con los ordenadores y pantallas del centro de gestión de la movilidad. Esta nueva infraestructura, puesta en marcha antes de Navidad con una inversión de casi 100.000 euros, cuenta con un nuevo vídeo wall que permite sincronizar varias pantallas. Desde aquí se coordinan todas las cámaras, que en total son 74, y sistemas de control de tráfico de la ciudad.

Según el Ayuntamiento, este nuevo sistema soluciona la situación especialmente crítica en la que se encontraba el entonces denominado Centro de Control de Tráfico. Más del 60% de los equipos estaban fuera de servicio debido a diversas averías, que no habían podido solucionarse como consecuencia de la falta de repuestos, dada la antigüedad de los mismos y el elevado nivel de exigencia al estar funcionando las 24 horas del día.

"A través de este dispositivo hemos abierto los ojos de la ciudad, hemos dado el banderazo de salida a la modernización a través de una gestión más directa, eficiente y global con este operativo que sincroniza las cámaras que existen en Sevilla y que nos ofrecen una aproximación en tiempo real a las cuestiones relacionadas con la movilidad", destacó Cabrera.

El anterior sistema no permitía la gestión de los nuevos equipos de alta definición con tecnología IP que se han venido instalando en los últimos tiempos, ya que las pantallas no tenían resolución para ello. Así, el potencial de las nuevas cámaras estaba desaprovechado al no poder ser gestionado desde el vídeo wall. Por ello, el centro de gestión no podía acceder a las imágenes de las 21 cámaras fijas del Plan Centro, ni tampoco a las nuevas 11 cámaras móviles de alta definición que dispone el Consistorio.

El nuevo vídeo wall es capaz de integrar todas las cámaras, tanto las que poseen sistemas analógicos como las de nueva tecnolocía IP, que serán manejadas con una única aplicación informática. Las cámaras permiten el visionado, pero no la grabación de lo que acontece donde están colocadas.

El delegado negó que las cámaras del Plan Centro puedan volver a su función primigenia en los próximos años. Primero habrá que diseñar un nuevo plan de movilidad para la ciudad, que se debatirá en una mesa que empezará a convocarse a partir de este mismo mes de enero. De esa mesa, que celebrará reuniones periódicas, saldrá un nuevo plan consensuado y diseñado por distintos estamentos y colectivos.

Los ejes de ese plan, a juicio de Cabrera, serán una remodelación de las normas de carga y descarga en el casco antiguo, el estudio de las principales vías para saber cuáles de ellas tienen una mayor densidad de circulación, potenciar el transporte público por encima del privado, favorecer rutas ciclistas para que tengan acceso directo por calles de plataforma única, habilitar más zonas para peatones, en las que se vigilen también los veladores. "Habrá que conocer la opinión de todos los colectivos implicados, ciclistas, motoristas, hosteleros...", dijo el edil, que avanzó que el plan estará listo en este mandato.