El PP siempre fue especialmente duro contra el gobierno de Monteseirín en asuntos de gestión económica, sobre todo cuando el alcalde socialista no dejaba de hacer una obra por el hecho de que no estuviera contemplada en el presupuesto. Aquel gobierno ejecutaba el proyecto y lo incluía en la que técnicamente se llama como cuenta 413, el agujero donde iban a parar desde gastos menores hasta partidas de grandes proyectos como los túneles de Bueno Monreal y Los Arcos. Juan Ignacio Zoido se fijó como prioridad que la cuenta 413 quedara limpia a la mayor brevedad, tal como suelen recomendar los informes de Intervención General. En condiciones normales no debía haber un solo gasto sin consignación presupuestaria, ni se debían usar los reconocimientos de créditos más que para gastos verdaderamente imprevistos.

En enero de 2011, en el último tramo de mandato de Monteseirín, en la polémica cuenta 413 había 401.738,45 euros pendientes de una partida presupuestaria para ser pagados. Seis meses después, la cuenta había engordado hasta los 10.110.154,69 euros. Se da la circunstancia de que entre abril y mayo de 2011 se incluyeron en la cuenta un elevadísimo número de facturas por importe de cerca de 10 millones de euros, de los cuales más de 9 eran de la empresa metropolitana de aguas, Emasesa, por conceptos como el consumo de agua o la red Secora. El gobierno de PSOE e IU redujo la deuda de la joya de la corona de las empresas municipales trasladando gastos a esta cuenta y no se privó de realizar inversiones en las vísperas de las elecciones municipales, que se celebraron el 25 de mayo.

El informe de la Intervención General sobre la liquidación del presupuesto de 2014 revela que el gobierno de Zoido dejó 588.595 euros en esta cuenta a la que van a parar los gastos efectuados y que están pendientes de cobertura en el presupuesto. "Responden a facturas de años anteriores que hubieran debido contabilizarse antes del 31 de diciembre de 2014, a pesar de haberse disminuido respecto del saldo inicial del ejercicio, su aplicación al presupuesto resulta prioritaria de conformidad con los establecido por la normativa vigente", indica el informe.

Técnicamente es habitual que los ayuntamientos hagan uso de esta vía, pero el PP no ha podido cumplir en este caso una promesa, pese a las medidas tomadas al respecto desde la Dirección General de Hacienda y Gestión Presupuestaria, que remitió cartas a los directores generales, jefes de servicios y hasta jefes de sección de distrito para que quedaran regulados estos gastos, asignados ya a partidas presupuestarias concretas.

Respecto a los reconocimientos de crédito, tan criticados por el PP, Zoido tuvo que recurrir a este instrumento incluso para abonar facturas del suministro eléctrico del Ayuntamiento por valor de más de 600.000 euros.