La Policía Nacional ha detenido en Morón de la Frontera a un hombre de 38 años como supuesto autor de cinco robos con violencia e intimidación. Para ello, el atracador usaba un cuchillo de grandes dimensiones "para intimidar y amenazar de muerte a sus víctimas", con el objetivo de apropiarse de la recaudación de los establecimientos.

El detenido accedía a los locales utilizando diferentes disfraces para ocultar su rostro, con el fin de dificultar su reconocimiento, y aprovechaba el momento en el que el dependiente se encontraba solo para actuar sin testigos, según detalla la Policía en un comunicado.

Todos los atracos se cometieron en el transcurso de un mes en la citada localidad y con el mismo modus operandi, "lo que llegó a generar un alto nivel de alarma social entre comerciantes y vecinos del municipio, así como también de la comarca, ya que el autor actuaba con gran violencia", apuntan los agentes.

El primero de los robos se llevó a cabo en una tienda de golosinas de la calle San Miguel; el segundo y el tercero en dos estancos de la avenida Asunción y en la calle Utrera, mientras que los dos últimos se habrían perpetrado en la calle Marchena, en una panadería y en un estanco. Fruto de todos esos robos, el autor de los mismos se hizo con un botín de casi 9.000 euros de dinero en efectivo.

El detenido contaba con varios domicilios, no residía en la localidad y usaba distintos disfraces a la hora de cometer los delitos, "detalles que dificultaron enormemente su reconocimiento". Aun así, los investigadores descubrieron finalmente la identidad del autor, su modus operandi y su ámbito de actuación, por lo que se estableció un dispositivo de búsqueda que permitió que la detención se llevara a cabo de forma rápida y eficaz.

Una vez detenido, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Morón de la Frontera, donde se decretó su inmediato ingreso en prisión. Los investigadores continúan gestiones para esclarecer otros hechos similares ocurridos en localidades aledañas.