Juan Espadas se quita un quebradero de cabeza. Los técnicos han encontrado la fórmula para blindar los contratos de obras de las bajas temerarias. El modelo a seguir se estrena en la rehabilitación de las naves de Renfe de San Jerónimo. En el nuevo pliego (el primero fue rescindido de mutuo acuerdo con la adjudicataria) la oferta económica cuenta con 40 puntos, la misma puntuación que la memoria de análisis de la ejecución. Con esto se evita que el Ayuntamiento tenga que otorgar una obra a la empresa que presente la propuesta más beneficiosa para las arcas municipales. El resto son 10 puntos para mejora del plazo de garantía y otros10 puntos por el compromiso de entrega de la documentación al final de los trabajos.

Esta fórmula para los pliegos de los grandes contratos que se liciten a partir de ahora cuenta con el visto bueno del secretario y el interventor municipal. La oferta económica tendrá menos de la mitad de los puntos y se introducen conceptos como la valoración técnica, los plazos de garantía y el formato en el que se entrega la documentación. La siguiente obra que utilizará estos pliegos es la de Mateos Gago, que también tuvo que ser rescindida de mutuo acuerdo el contrato tras las dificultades encontradas para fijar el inicio y el desarrollo de los trabajos.

A finales del pasado junio, el gobierno socialista tuvo que resolver de mutuo acuerdo y dejó sin efecto el contrato de obras con suministro de materiales necesarios para la ejecución de la actuación en las naves de Renfe. Los trabajos se encuentran cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) en el marco del programa operativo de crecimiento sostenible 2014-2020 suscrito el pasado 19 de diciembre entre el Ayuntamiento y la empresa UTE Ingemont S. A. y Africana de Contratas y Construcciones S. L. U.

El pliego del edificio de San Jerónimo otorga la misma puntuación a la memoria de ejecución

En el expediente del coordinador general de Alcaldía se expuso que se procedería a la devolución de la garantía constituida al no haberse producido daños y perjuicios. La dirección facultativa de las obras emitió un informe el 16 de abril en el que se detallaba una serie de circunstancias imprevistas que imposibilitan el inicio de las obras de acuerdo a los plazos contractuales, por lo que se propuso la resolución por mutuo acuerdo del contrato.

En el nuevo pliego para las naves de Renfe de San Jerónimo se describe entre los criterios, que dependen de un juicio de valor, el análisis de la ejecución de la obra, que cuenta con 40 puntos: “El licitador deberá aportar una memoria que contenga una descripción detallada de los procesos constructivos y organizativos en relación con el cumplimiento del plazo de ejecución valorándose la coherencia entre los procesos que se describan y el cumplimento del plazo de ejecución. Al licitador que presente la mejor descripción en relación con el contenido del pliego de prescripciones técnicas, se le otorgará la máxima puntuación, valorándose el resto conforme a lo señalado en cuanto al grado de coherencia y detalle”.

El próximo contrato que saldrá a licitación con estos pliegos será la reforma de Mateos Gago

Entre los criterios de la oferta económica (40 puntos) se encuentran que se otorgarán cero puntos a las ofertas que igualen el presupuesto de licitación (en este caso es de 2,4 millones); se concederá el máximo de puntos a aquella oferta que sea un 20% inferior a la media de las ofertas presentadas, siempre que no exista una oferta que se encuentre por debajo de este valor; y si existiese una oferta que se encontrase por debajo del valor atribuido inicialmente a la baja anormal, sería esta oferta la que obtendría el máximo de puntos en este criterio, siempre que se hubiera aceptado la justificación a la misma presentada por el licitador.

El próximo gran contrato que saldrá a licitación con estos nuevos pliegos será la remodelación de Mateos Gago. El Ayuntamiento aprobó rescindir de mutuo acuerdo el contrato con la empresa adjudicataria de la obra, Grulop 21, por “las dificultades surgidas en los últimos meses”. Los trabajos se posponen como mínimo hasta después de la Semana Santa de 2020.

Una de las fachadas de las naves de Renfe de San Jerónimo.