De Loewe a Capitol Casi medio siglo de negocio
El local que abandona Victorio & Lucchino podría ponerse a la venta por 9 millones de euros
La historia de la Plaza Nueva como zona exclusiva de negocio comenzó a gestarse en 1963. En aquel año la firma Loewe -cuando aún era de capital español- abrió una tienda en este emplazamiento, la misma que mantiene actualmente y que se amplió en 2008. Esta enseña fue la que estableció el horario de apertura continuada (de 10:00 a 20:30, de lunes a sábado) y el trato diferencial con los clientes como pautas a seguir por los negocios que posteriormente decidieron asentarse en esta zona. En octubre de 1998 la casa italiana Max Mara desembarcó en la Plaza Nueva con la ocupación de un local junto a la capilla de San Onofre. En estos años se ha hecho con una clientela fija que acude a comprar una variada oferta de artículos que abarca desde el sport hasta la gama más sofisticada.
Fue ya en la década pasada cuando comenzó a acuñarse el término Milla de Oro para referirse a la Plaza Nueva. Carolina Herrera y Purificación García, ambos del grupo gallego Domínguez, abrieron sus respectivas tiendas en diciembre de 2001, donde comparten un único local (dividido en dos) junto al Hotel Inglaterra. En marzo de 2002 la tienda Pineda cambiaba de nombre por la de El Caballo, dos negocios con un único propietario: Francisco Javier Pineda. Un año después los diseñadores José Luis Medina y José Víctor Rodríguez invertían 6 millones de euros en el local de 850 metros cuadrados que anteriormente ocupaba la entidad financiera Citibank. Ya en 2004 la firma hispalense Agua de Sevilla se sumaba al elenco de marcas exclusivas con la apertura de su tercera tienda sevillana en la Plaza Nueva esquina con Méndez Núñez. Sus propietarios -José Antonio Sáenz e Isabel Rodríguez de Quesada- emplearon alrededor de 733.000 euros en remodelar y decorar un local de 300 metros cuadrados (adquirido anteriormente) que se destinó a moda, complementos y a la gama de fragancias y perfumes que da nombre a la conocida marca. Poco después lo haría la marca norteamericana Tommy Hilfiger.
Sin embargo, este panorama comenzó a cambiar a partir de 2008. El primero en abandonar la Plaza Nueva fue El Caballo, que en otoño de ese año vendía su local a Loewe, que lo aprovechó para ampliar su tienda. Posteriormente Tommy Hilfiger haría lo propio. El nuevo vecino de la Milla de Oro que sustituyó a la firma estadounidense fue Nespresso. El año pasado Agua de Sevilla cerraba su tienda, que ahora ocupa Capitol, el primer bar de copas de la Plaza Nueva que regentan los mismos propietarios de la terraza Alfonso. El último en abandonar la milla de oro ha sido Victorio & Lucchino.
El consultor inmobiliario Ignasi Jordá especifica que desde hace un año los diseñadores sevillanos iniciaron los trámites para vender o arrendar este local, adquirido en 2003 a Agua de Sevilla por 3,3 millones de euros. Este espacio -que consta de 850 metros cuadrados distribuidos en tres plantas- se pondría a la venta por 9 millones de euros, según Jordá, por lo que los diseñadores lograrían una rentabilidad del 6% o 7%. En caso de que se decanten por el alquiler, el precio rondaría los 50.000 euros al mes.
Actualmente, según este consultor, Nespresso está pagando 100 euros al mes por metro cuadrado, un precio más caro que el que podría fijarse por la tienda de V&L al ser de menor superficie. Carolina Herrera abona 70 euros mensuales al ser un contrato de alquiler más antiguo.
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