Un jarro de agua fría. No habrá titulaciones de Medicina y Enfermería en la Universidad Loyola de momento. La Agencia para la Calidad Científica y Universitaria de Andalucía (Accua) -antigua Deva-, perteneciente a la Junta de Andalucía (pero independiente en sus decisiones), considera que los grados que pretendía impartir la institución jesuita el próximo curso no reúnen las condiciones requeridas para dichas especialidades. Una respuesta -a la que la entidad privada recurrirá ante el Gobierno en el plazo establecido- que hace añicos los planes fijados para el nuevo ejercicio académico y que afecta a casi un millar de alumnos que ya habían solicitado plaza en la Facultad de Ciencias de la Salud, que se construye desde hace meses en el campus que la Loyola posee en Dos Hermanas. 

El nuevo complejo, que duplica la superficie actual construida, podría perder dos de sus grandes bazas. La Accua no ha dado luz verde ni a Medicina ni Enfermería. Ambas titulaciones suman un millar de solicitantes. En la rueda de prensa organizada a principios de año para dar a conocer la nueva facultad -al frente de la cual están Antonio Núñez (decano) y Herminia Romero (vicedecana)- se habló de que el 22 de abril se celebraría un examen para los aspirantes a las titulaciones del nuevo centro. Además de Medicina y Enfermería, se ofertan Fisioterapia y Biotecnología, que sí han obtenido el visto bueno.

Según ha podido saber este medio de comunicación, el revés que ha sufrido la Loyola en sus planes de expansión ha sido comunicado mediante una carta a los alumnos solicitantes. En ella se insiste en que la universidad privada presentará ante el Consejo General de Política Universitaria (CGPU), órgano dependiente del Ministerio de Universidades, una reclamación por la respuesta negativa dada por la Accua. A partir de ahí, la CGPU tiene 30 días para resolver. 

"La Junta no ha denegado nada"

En la Loyola aseguran que "lucharán hasta el último aliento" para que Medicina y Enfermería se impartan el próximo curso, aunque reconocen que van "muy ajustados de tiempo", ya que, según los plazos establecidos, la respuesta definitiva de la CGPU puede demorarse un mes. Insisten en no haber cobrado nada por el examen del pasado 22 de abril. También afirman que han recibido varios correos de apoyo por parte de los futuribles alumnos tras conocerse el informe de la Accua. "Están dispuestos a esperar un año más", detallan desde la institución jesuita.

Fuentes de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación han explicado a Diario de Sevilla que la decisión de la agencia de calidad es "independiente" y que la Junta "no ha denegado nada". Inciden en que el informe de la Accua se envía directamente a la CGPU, que ha de validarlo. En caso contrario, su decisión es vinculante y no hay posibilidad de respuesta por parte de la agencia andaluza. Sólo acatarlo. Debe recordarse que en la rueda de prensa mencionada se habló de que la nueva facultad de la Loyola había cerrado un acuerdo con la Consejería de Salud para las prácticas de los alumnos. 

La noticia de esta denegación trasciende pocos días después de que se conozca que la Universidad de Huelva (UHU) impartirá Medicina el próximo curso y en pleno cruce de acusaciones entre la Hispalense (US) y el CEU a cuenta de la nueva universidad privada, la Fernando III, que tiene previsto ponerse en marcha en septiembre de 2024 en Bormujos. Este centro de enseñanza superior también plantea acoger un grado de Medicina. Tanto los responsables de la Loyola como del CEU aseguran que las nuevas titulaciones sanitarias se amparan en la fuerte demanda que hay de dichos estudios en la sociedad, un interés avidado con la pandemia. 

Un posible problema financiero

La inversión prevista por los jesuitas en la nueva facultad ronda, según se detalló en aquella comparecencia, los 30 millones de euros. Un desembolso que podría verse afectado por la denegación de los títulos de Enfermería y Medicina, puesto que, por ahora, no podrían disponer del dinero de las matriculaciones.

La Universidad Loyola fue la primera privada que se creó en Andalucía, cuando la Junta la gobernaba el PSOE. Ahora, con el PP en el Ejecutivo autonómico, se anuncian otras dos a medio plazo: la Fernando III en Bormujos y la Utamed en Málaga.