El World Travel & Tourism Council (WTTC) ha confirmado que el ex presidente de EEUU Barak Obama será el orador principal del congreso internacional de turismo que se celebra en Sevilla entre el 2 y el 4 de abril. Se trata de una de la citas más importantes de la agenda internacional que está desarrollando la ciudad en los últimos años. La visita se producirá tres años después de la prevista en 2016, cuando estuvo por primera vez en España en viaje oficial, y que tuvo que ser cancelada.

Este organismo mundial está considerado como la autoridad máxima del turismo a nivel empresarial, representando a un sector que genera el 9,8% del PIB mundial y 284 millones de empleos. La cumbre mundial de la WTTC (The Global Summit) es el evento anual más importante de la industria mundial del turismo. Las invitaciones a la cumbre mundial se restringen a jefes de gobierno, ministros y presidentes y consejeros delegados seleccionados de empresas globales del sector de viajes y turismo, así como otros invitados de gran notoriedad. Por tanto, el evento acoge a los primeros espadas de la autoridad turística pública y la privada. Según anteriores citas, se estima que podrían ser más de 1.500 invitados entre ponentes, asistentes, patrocinadores y socios de más de medio centenar de países. La presencia de Barack Obama en esta cumbre, cuya misión es facilitar que el crecimiento del turismo se ajuste a los criterios de sostenibilidad, ayuda a visibilizar también su altura.

Un impacto millonario

Su impacto mediático para Sevilla será muy importante. Por poner algunos ejemplos de anteriores ediciones, la cumbre celebrada en Bangkok en el año 2017 se alcanzó una contrapresestación publicitaria superior a 4,2 millones de dólares y 2.300 millones lectores tuvieron acceso a la información del evento. Y en la de Madrid del año 2015 se registraron más de medio millón de impactos televisivos previos al evento y más de 13 millones y medio durante el mismo.

Desde el gobierno municipal se insiste en que ésta no es una cumbre más que viene a Sevilla. Es la cumbre por excelencia de la industria turística mundial, además de ser la guinda para la estrategia internacional desplegada por el Consorcio de Turismo de Sevilla. Entre este año y el próximo Sevilla acogerá las cumbres internacionales de la Asociación Europea de Operadores Turísticos (ETOA) y de la Asociación de Agencias de Viajes Británicas (ABTA), el Global Summit CAPA Low Cost Long-Haul, un evento de aerolíneas low cost que operan el largo recorrido y especializadas en el mercado asiático, el I Foro Iberoamericano de la Federación Mundial de Ciudades Turísticas (WTCF) y la asamblea internacional de la Red de Ciudades Magallánicas.

Un año de negociaciones y un banco de proyectos

La Cumbre de la WTTC se concibe en Sevilla como "un proyecto de ciudad, de comunidad autónoma y de Estado". Su repercusión trasciende el ámbito local y ha sido necesario un largo año largo de negociaciones con las tres administraciones. Además de una cita turística, es una oportunidad para atraer inversión no sólo en el sector turístico, sino también en otros. Por este motivo, hasta que la cumbre se celebre en abril, desde el Ayuntamiento de Sevilla se fomentará el trabajo con el empresariado local, andaluz y estatal, con la idea de crear entre todos un banco de proyectos en los que haya posibilidades y oportunidades de que los altos ejecutivos que visiten la capital decidan poner en ellos su dinero.

Regreso tras la visita cancelada en 2016

Barack Obama tenía prevista una visita a Sevilla en 2016, dentro de una agenda por otros puntos de España, que fue cancelada tras la matanza de cinco policías estadounidenses en Dallas. El plan era que el entonces presidente, acompañado de Felipe VI, recorriera el centro histórico de Sevilla, pasando por la Catedral y el Alcázar. La capital se había blindado para dicho evento con un importante dispositivo de seguridad dispuesto también por el Ayuntamiento de Sevilla, que asumió el coste de la cancelación. El alcalde, Juan Espadas, remitió entonces una carta en la que lamentaba profundamente la cancelación de esta visita e invitaba al mandatario estadounidense a volver en otra ocasión a la capital hispalense.

Barack y Michelle Obama son dos enamorados de España. Y su hija Malia, también, pues eligió Sevilla para pasar un año sabático. La visita del presidente en 2016 fue un hito en la historia de las relaciones bilaterales entre ambos países: fue la primera vez que un mandatario estadounidense pisó suelo español en quince años.