Una serie de jubilaciones y traslados previstos para los próximos meses en la cúpula de la Policía Nacional en Sevilla vuelve a poner de manifiesto la falta de comisarios que padece la plantilla de la capital andaluza. Puestos como el del jefe superior, el jefe de la Unidad de Coordinación Operativa Territorial (UCOT), el comisario provincial o el jefe de la Brigada de Policía Judicial se jubilarán en los próximos meses, y tendrán que ser cubiertos con comisarios que vengan de fuera de Sevilla. Además, habrá también alguna salida de comisarios en misiones diplomáticas, con lo que la estructura de mando de la Policía tendrá que renovarse profundamente en los próximos meses.

La cúpula de la Policía Nacional lleva ya varios años funcionando de manera un tanto peculiar, con un elevado número de comisarios que se encuentran en funciones y con muchos puestos para comisarios que están siendo desempeñados por inspectores jefes. De hecho, actualmente sólo hay dos de los 15 puestos de comisarios de Sevilla cubiertos por personas que tienen su plaza. El resto se encuentran en comisiones de servicio o en puestos cubiertos de manera accidental.

La falta de comisarios es un problema grave para la estructura de mando de la Policía Nacional, que tendrá que enviar comisarios de otros puntos de España para suplir estas jubilaciones. El secretario general de la Unión Federal de Policía (UFP) en Sevilla, Antonio Jurado, lamentó que en estas situaciones se suelan enviar a otros comisarios que están próximos también a la jubilación, que en muchos casos pasan sólo unos meses en Sevilla.

Este sindicalista añadió también que la Dirección General ha cambiado el baremo para los ascensos a comisarios de manera discrecional, lo que ha provocado que algunos de los aspirantes de Sevilla que estaban muy bien colocados en el proceso finalmente no han aprobado y no podrán venir como comisarios a una plantilla y una ciudad que ya conocen porque llevan años trabajando en ella como inspectores jefes.

El representante sindical expuso también que el problema de personal es acuciante en la Policía Nacional en Sevilla, donde muchos agentes se siguen viendo obligados a hacer custodias hospitalarias de presos porque el Gobierno no construye el módulo para reclusos que prometió hace más de dos años. A esto también se le suman problemas con la uniformidad y, en el plano puramente sindical, no se convocan reuniones trimestrales.