"Son piezas únicas, exclusivas, porque no hay dos piedras en la naturaleza idénticas". Bruna Tovani explica lo que distingue sus creaciones pictóricas sobre piedra de otras realizadas sobre lienzo. Un formato que la artista de nombre italiano -"porque mi padre era de Italia"- pero nacida en Sevilla emplea con frecuencia para reproducir obras de pintores como Toulouse Lautrec o Vicent Van Gogh. Además del soporte, Tovani resalta la importancia de poder tocar y coger con las manos la obra, combinando de alguna manera escultura con pintura. 18 ejemplares de estas piedras (cantos rodados y una de granito) estarán expuestas hasta el 29 de marzo en el Centro Adorea (C/ Baltasar Gracián, 4), sala en la que, junto a la pintora Paulina Munugarren, también presenta dos figuras en barro (una de ellas una menina). Y es que, la también monitora de belenismo del distrito San Pablo, posee además experiencia con el modelado, el esmalte a fuego y los mosaicos, especialidad esta última con la que logró dos premios cuando estudiaba en la Escuela de Artes y Oficios. Bruna Tovani dice cómo la afición a pintar sobre piedra le vino "en una época en la que viajaba mucho sola y vi en ello la posibilidad de ganarme la vida para poder seguir viajando". Después de casarse, abandonó la vida bohemia y desde entonces sus obras ya se han expuesto en lugares como Las Sirenas y La Puebla del Río.