Un matrimonio de ancianos se llevó todos los ahorros de su vida, casi 40.000 euros, al hospital porque temían que alguien robara en su casa o la ocupara. La mujer, de 86 años, tenía que pasar una temporada ingresada en el Virgen del Rocío y su marido estaría en el hospital con ella acompañándola. No sabían cuándo regresarían a casa, por lo que decidieron meter el dinero en una bolsa y llevarlo consigo. Una vez en el hospital, lo metieron en un armario.

Allí, con la mujer en la cama y sin poder reaccionar, dos familiares del paciente que ocupaba la otra cama de la habitación aprovecharon un momento de ausencia del marido para registrar el armario. Allí encontraron el dinero y se lo robaron. La Policía Nacional lo ha recuperado poco después y ha detenido a dos personas por el robo, entre ellas un menor de edad. Los ladrones enterraron los billetes en el campo. Fue clave la labor de un perro de la Policía, entrenado en la búsqueda de dinero, para encontrarlos.

Los hechos ocurrieron el 15 de marzo. El matrimonio denunció la sustracción y la Policía inició una investigación, que le correspondió al grupo de Policía Judicial de la comisaría del distrito Sur. Los agentes visionaron las cámaras de seguridad y tomaron declaración a varias personas. Esto les permitió establecer la identificación de los dos presuntos autores, que eran dos hermanos de 22 y 17 años. 

Los billetes recuperados.

El día después del robo, la Policía localizó a uno de los sospechosos en su vivienda. El joven fue detenido y se registró la casa, aunque no se encontró allí el dinero. Un día después de esta detención, varios individuos encapuchados y armados con bates de béisbol se presentaron en casa del otro de los implicados, que todavía no había sido detenido. Los asaltantes supieron que este otro sospechoso, el menor de edad, tenía una gran cantidad de dinero y se pensaron que la guardaba en su casa. 

Fue entonces cuando la Policía pudo detener al menor y averiguar que había escondido los billetes en un campo cercano a la casa de su novia. Los agentes ubicaron la zona en la que podían estar ocultos los ahorros del matrimonio anciano y llamaron a la Unidad de Guías Caninos. Un perro entrenado en la búsqueda de dinero materializó el hallazgo. 

El lugar donde se guardó el dinero.

La Policía entregó los billetes recuperados al matrimonio octogenario. Dada su avanzada edad, los agentes acompañaron a los ancianos hasta un banco, donde los ahorros quedaron ingresados. A los detenidos se les imputa un delito de hurto. El menor quedó a disposición de la Fiscalía de Menores, que decretó su ingreso en un centro de internamiento. El mayor de edad pasó a disposición judicial y fue puesto en libertad con cargos.