Tres novedades a la vista. Tussam permitirá a los usuarios pagar con tarjeta el billete univiaje en los autobuses, mejorará los tiempos en los que se activa la recarga de los títulos de viaje a través de la página web, y trabajan en la implantación de un sistema para que las personas con movilidad reducida piquen las tarjetas sin cobrar indebidamente a otros pasajeros con el título en el bolsillo. La instalación de dispositivos de pago y recarga de títulos en el interior de los vehículos no está prevista.

La primera variación que será realizada es arrancar un proyecto de evolución del sistema de billetaje implantado en el interior de los autobuses que incluye como una de sus novedades el pago mediante tarjeta de crédito y débito. Los técnicos apuntan que, en principio, sería sólo para el pago del billete univiaje y más adelante se estudiarían y aplicarían en su caso otras formas más avanzadas de uso. Los títulos de viaje ya se abonan con este método de pago en las máquinas y estancos. La segunda consistirá en mejorar los tiempos en los que se activa la recarga de los títulos de viaje a través de la página web.

La empresa mejorará los tiempos en los que se activa la recarga de los títulos en la web

Una tercera medida prevista que se instale a lo largo de este año es un sistema para que las personas con movilidad reducida piquen las tarjetas sin cobrar indebidamente a otros pasajeros con el título en el bolsillo. Desde la empresa municipal de transporte apunta que “se encuentra en estudio la adopción de medidas que permitan mejorar la accesibilidad al sistema de cancelación para personas con movilidad reducida, que resulten compatibles con la garantía de que no se produzcan cancelaciones indeseadas de títulos de viaje que se encuentren situados en el bolsillo de los pasajeros, dado que la tecnología que se utiliza es de proximidad”.

La idea primera era instalar las máquinas para que las personas con movilidad reducida puedan picar los billetes en la puerta trasera de los autobuses. Ha sido rechazado después de los problemas que está generando en varias ciudades como Madrid. Desde el pasado 29 de noviembre, la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT) dispone de pago contactless en toda su flota de autobuses. Los usuarios de los autobuses públicos ya no necesitan llevar dinero en efectivo y pueden pagar con cualquier dispositivo que cuente con esta tecnología, desde tarjetas bancarias a teléfonos móviles y relojes inteligentes. Tras un proyecto piloto que se desarrolló en algunas líneas y buses, la oficina de atención al cliente ha reconocido haber recibido 250 reclamaciones de usuarios a los que se les ha cobrado billete a pesar de tener el abono transportes o el metrobús al pasar por el lector el monedero con tarjetas bancarias y el abono. La instalación de dispositivos de pago y recarga de títulos en el interior de los vehículos no está prevista de momento.

La instalación de dispositivos de pago y recarga en el interior no está prevista

No será la única novedad de la empresa municipal de transporte este año. El Ayuntamiento recuperará los separadores en el carril bus con el objetivo de aumentar la velocidad comercial de los autobuses. Los técnicos de Movilidad se encuentran realizando un análisis de los espacios que ya existen por toda la ciudad reservados para los vehículos de Tussam y decidir las zonas en las que serán instalados para evitar la invasión de los coches privados. El modelo de bolardo primará su visibilidad, durabilidad y seguridad.

El dinero necesario para la puesta en marcha del plan de carriles bus dispone de una partida reservada en las cuentas para el año que viene. Serán 2,1 millones de euros de los que se usarán las cantidades necesarias para la implantación de esos separadores para la mejora del funcionamiento del transporte público. El resto del presupuesto irá para la implantación de un sistema de control de acceso al casco histórico de Triana; o las infraestructuras necesarias para llevar a cabo el control efectivo de la carga y descarga en el Casco Antiguo.

Un título de viaje sobre una máquina instalada en el interior de un autobús.