Calle Rioja
Francisco Correal
Desde Barcelona se ve La Flor de Toranzo
FERNANDO Hierro era el capitán de la selección andaluza que el 22 de diciembre de 1998 disputó en el Sánchez Pizjuán un partido contra un combinado de futbolistas de la Liga española cuyos fondos irían destinados a los damnificados del huracán Mitch. El verdadero protagonista del partido fue Carlos Cano, que interpretó a capela el himno de Andalucía. Viéndolo en las fotos a pie de césped, con su abrigo y una garganta al cuello, no es difícil imaginar que en cuanto tuviera ocasión, Carlos iría a ver a su buen amigo Antonio Muñoz-Cariñanos, el otorrino que le revisaba las cuerdas vocales.
Carlos Cano tuvo que posponer su última actuación artística en Sevilla. Horas antes de la cita con su público en el teatro Lope de Vega, el 16 de octubre de 2000, un etarra asesinó en su consulta al doctor Muñoz-Cariñanos. "Fuimos juntos al entierro y esa misma noche dio el concierto. Como no podía ser de otra manera, no estuvo a su altura, estaba horrorizado", dice diez años después Pedro Ruiz-Berdejo (Sevilla, 1929), uno de los históricos del andalucismo. En su libro Andalucía es una nación incluía las canciones de Carlos Cano que llegaron a estar prohibidas. Ahora promueve un acto de homenaje al cantante que se celebrará el día 30 en el Lope de Vega, el escenario del que se despidió de los sevillanos el autor de El rey Al-Mutamid dice adiós a Sevilla.
Ruiz-Berdejo conoció siendo niño a Blas Infante, autor del himno de Andalucía. "Mi padre tenía el despacho en la calle Redes y Blas Infante en Miguel del Cid". Cuando murió Diego Soldevilla, el abogado andalucista se hizo cargo de los intereses jurídicos de la familia Infante y su ingente patrimonio inmaterial. Carlos Cano nace en 1946, un año muy importante en la vida de Ruiz-Berdejo: en esa fecha fue uno de los dos jóvenes que deslizó desde lo alto de la Giralda una bandera blanca y verde con el lema "Viva Andalucía Libre" y ese mismo año se llevó una reprimenda pastoral del cardenal Segura por proponer en un congreso de estudiantes la supresión de la Religión como asignatura de Derecho.
El himno de Andalucía lo compuso Blas Infante y los arreglos los hizo José del Castillo, un músico que fue represaliado y destituido como director de la Banda Municipal. Cuando murió, extraviaron muchas de sus partituras, incluida la del himno de Andalucía. Éste apareció en casa de María de los Ángeles Infante, una de las hijas del notario. "Estaba en un libro de Casés Arbó, un catalán catalanista, amigo de Infante. Todo el libro está en catalán, menos la letra del himno". Fue el cuerpo jurídico que Ruiz-Berdejo manejó para firmar los contratos de autoría con Jarcha, Carlos Cano y otros artistas que cantaron el himno.
En la transcripción de esas notas había un defecto de copia. "Carlos me decía que no se podía cantar, que se ahogaba". Le pidieron al maestro Albero Francés, que fue director de la Banda Municipal, que hiciera una versión más ortodoxa. Carlos Cano estuvo muy unido no sólo al himno, sino a los otros símbolos del notario de Casares: la bandera "verde omeya, blanca almohade" que dio pie a una canción que es épica y lírica a la vez, y el escudo, con ese Hércules mítico revisitado por Carlos Cano en las Habaneras de Cádiz que compuso con Antonio Burgos.
Ruiz-Berdejo tiene sus biografías o semblanzas (firmadas por Diego de los Santos, Antonio Ramos Espejo, Fernando González Luccini), y los duetos del cantante con Aute, Serrat, Amalia Rodrigues, Compay Segundo o María Dolores Pradera. El homenaje lo organizan la Asociación Pro Defensa de la Copla Andaluza y el Ateneo Popular de Sevilla. Su promotor es este abogado del 29, hermano del Gran Poder y abogado defensor de La Carbonería a lo largo de once juicios.
También te puede interesar
Lo último
5 Comentarios