La capital andaluza parece que empieza a recuperarse en lo que respecta al uso de la bici, que venía cayendo desde 2013 por la ausencia de políticas favorables a este medio de transporte sostenible. El cambio de gobierno local (del popular Zoido al socialista Juan Espadas) y la aplicación de medidas para revertir la situación parecen estar dando sus frutos.

Según los datos obtenidos en octubre de 2017 por el Servicio de Sostenibilidad e Innovación Urbana en el que se integra la Oficina de la Bicicleta, las cifras de desplazamientos en bici rozan ya los 68.000, con lo que se acercan al récord de usuarios ciclistas logrado en 2011, cuando se registraron más de 72.500 desplazamientos (ver infografía adjunta).

La aplicación de medidas para revertir la caída parece estar dando sus frutos

Los ecocontadores instalados en las vías ciclistas han detectado que buena parte del incremento de desplazamientos se ha dado en la ronda histórica, donde se registran 4.772 frente a los 3.890 del periodo anterior (octubre de 2016). Así pues, en la ronda histórica, que es el punto tradicionalmente más transitado por ciclistas, el aumento de desplazamientos ha sido superior al 22%. Otras zonas en las que se ha elevado la presencia de ciclistas son los carriles de Reina Mercedes, un enclave al que acuden a diario miles de estudiantes y profesiores universitarios, y los del Palacio de Congresos de Sevilla Este, otra zona concurrida por sus eventos y espectáculos.

En Reina Mercedes se ha pasado de los 949 desplazamientos a los 1.148, lo que supone un incremento prácticamente del 21%; mientras en el Palacio de Congresos se han movido desde los 813 a los 960 desplazamientos, con lo que el aumento ha sido de un 18%.

Un caso contrario es el que ha tenido lugar en la segunda ronda de la Macarena que empieza en la avenida de Llanes y continúa por la ronda Pío XII. En este punto de la avenida de Llanes los ecocontadores han detectado una bajada de los desplazamientos ciclistas del 15%. En datos numéricos eso implica caer de los 572 desplazamientos a los 486.

Es un hecho que las estadísticas actuales son mucho mejores si las comparamos con el gran descenso que se registró en 2015, año en el que los desplazamientos no sobrepasaban los 61.700, una caída que venía de otro descenso anterior en 2013, cuando los desplazamientos habían bajado ya a 69.500.

La Oficina de la Bicicleta ha obtenido estos resultados de los ecocontadores instalados en las vías ciclistas de la ciudad. Se tata de unos sensores que permiten contar ciclistas de forma permanente, diferenciando los tipos de tráficos, mediante un aparato de alta tecnología para el conteo, colocado en una arqueta adyacente, con un Modem GSM que transfiere automáticamente los datos recogidos.

El sistema sólo contabiliza pasos de bicicletas con un margen de error de +/- 5%, resistente a entornos hostiles, totalmente estanco e invisible para no alterar el comportamiento de los peatones y evitar el vandalismo. Los ecocontadores permiten mejorar la gestión de la movilidad ciclista en la ciudad, ya que estudian los flujos de circulación, la frecuencia en el tiempo, la estimación del impacto de los centros de interés o nuevas actuaciones.

Actualmente están instalados en diez lugares: Jardines del Valle, Avenida de Llanes, Camino de los Descubrimientos, Plaza de Armas, Palacio de Congresos, Plaza de Cuba, Avenida de Carlos V, calle Reina Mercedes, Eduardo Dato y Avenida de Jerez.

En el informe, que puede verse en la web www.sevilla.org/sevillaenbici, se analiza también el papel de Sevici (la bicicleta pública de alquiler) en estos desplazamientos. Y la conclusión es que Sevici ha pedido usuarios que alquilan este servicio en relación a años anteriores: los 20.877 usuarios de 2011 han descendido hasta los 16.091 en el año 2017. Pero también es verdad que desde 2015 se mantiene en esta última cífra y no ha caído más, lo que indica que se ha estabilizado.

El gobierno local de Espadas aprobó a finales del año pasado un nuevo Plan de la Bicicleta cuyos objetivos de aquí a 2020 son mejorar la calidad de la red ciclista de 180 kilómetros que ya tiene la capital, actuando sobre los puntos más conflictivos, inseguros y transitados (sobre todo en la ronda histórica por ser el carril más usado por los ciclistas), conectarla con los principales intercambiadores de transporte (San Bernardo, Santa Justa, Plaza de Armas, Palacio de Congresos y Puerta Jerez) y construir aparcamientos seguros en esos núcleos de transporte.

El Ayuntamiento socialista tiene claro que es más urgente poner el énfasis en mejorar la calidad y eficacia de la red ciclista que en ampliar más kilómetros, ya que 180 kilómetros es una buena cifra para una capital como Sevilla.