La Botica, cocina artesanal para los que saben lo que quieren comer

La Botica, en Avda. de la Ciencia, 21, se presenta como un restaurante que apuesta por una propuesta gastronómica basada en el respeto al producto, la elaboración casera y una visión moderna de la cocina tradicional andaluza. Su carta, amplia y bien estructurada, está diseñada para satisfacer tanto a quienes buscan platos de toda la vida como a quienes valoran la calidad y la elaboración cuidada.

Uno de los pilares del concepto de La Botica es el uso de productos locales y con Denominación de Origen, priorizando ingredientes andaluces como el jamón de bellota ibérico, la cecina de vaca retinta o la mojama de atún. El restaurante también destaca por su compromiso con la elaboración artesanal: desde los caldos y salsas hasta el pan, todo se elabora en sus cocinas.

La carta arranca con una sección de aperitivos donde se puede encontrar una cesta de pan de masa madre, picos, aceitunas o patatas chips. A continuación, el comensal puede personalizar una tabla de chacinas y quesos, combinando entre productos como la caña de lomo ibérico 100%, el atún ahumado o quesos de cabra y vaca con distintas curaciones y sabores. Los platos fríos incluyen propuestas como ensalada de lechuga viva con manzana, pasas y vinagreta cítrica, cogollos con melva y vinagreta de tomate seco, y una ensaladilla de cecina. También destaca el paté de cerdo con reducción de vino tinto, canela y romero, una combinación que remite a sabores tradicionales con un toque de sofisticación.

Los platos calientes tienen un peso importante en la carta. Entre los guisos más representativos están los garbanzos a la cochambrosa, el potaje marengo y el conejo al guilindorro, todos con fuerte arraigo andaluz. También hay opciones de frituras y platos elaborados como el lingote de jarrete con patatas a lo pobre y los muslitos de pollo a la moruna.Los amantes de las verduras pueden optar por propuestas como el puerro confitado con velouté de estragón y soja texturizada o una parrillada de verduras con alioli de ajo asado.

En carnes, La Botica ofrece cortes seleccionados como la picaña de vaca retinta añojo, el solomillo de la misma raza y la pluma ibérica de bellota. Estos platos pueden acompañarse con guarniciones sencillas como patatas fritas, a lo pobre o verduras salteadas, además de un abanico de salsas caseras como alioli, salsa brava, mayonesa de gambas o mayonesa de jamón.

El apartado de pescados se basa en producto fresco, variable según disponibilidad. Algunas de las opciones recurrentes incluyen la parpatana de atún rojo o el choco, presentados con cocciones sencillas que respetan la calidad del pescado. La carta también contempla un menú infantil, con platos como tiras de pollo empanadas, tortilla de patatas y pechuga a la plancha, todos adaptados para dietas sin gluten. Una de las claves de La Botica es que toda su carta está libre de gluten, lo cual es un valor diferencial en un contexto donde este tipo de cocina sigue siendo limitada en muchas propuestas gastronómicas. Esta característica se extiende a todo el menú, incluyendo pan, rebozados, postres y salsas, lo que garantiza seguridad alimentaria sin renunciar al sabor ni a la variedad.

En cuanto a los postres, La Botica mantiene el mismo compromiso con la elaboración casera. Se ofrecen opciones como arroz con leche de coco, citronela y lima, torrija emborrachada en vino oloroso rebozada en azúcar y canela, y bizcocho de chocolate con frutos secos acompañado de delicioso helado de vainilla.