La congelación del precio de la plaza en las guarderías adheridas al programa del convenio de la Junta está crispando al sector a poco más de una semana de iniciarse un nuevo curso. El mantenimiento de este coste ya originó grandes críticas por parte de las patronales y asociaciones que aglutinan a las escuelas infantiles, que llevan padeciendo una asfixia financiera desde principios de esta década por distintos motivos.

El malestar viene provocado, principalmente, por la promesa incumplida del nuevo Gobierno andaluz, que garantizó al poco tiempo de llegar al poder que subiría el precio de estos puestos, un incremento que iría parejo a un plan para que a medio plazo dicho servicio fuera gratuito para todas las familias.

Se respondía así a una vieja reclamación del sector, que lleva diez años con las tarifas congeladas, pese a la subida del IPC y del salario mínimo interprofesional (SMI). Los dueños de las escuelas creyeron que se ponía fin a una época de endeudamientos para pagar los sueldos y de despidos de trabajadores al ser imposible recibir una línea de créditos.

Todas estas esperanzas se hicieron trizas a finales de julio, cuando en la última mesa sectorial de Educación Infantil –a pocos días de finalizar el pasado curso– se informó de que esta subida se posponía. No podía hacerse realidad para la fecha prevista (enero de 2020), sino nueve meses más tarde (septiembre del próximo año). La razón era la oposición de la Intervención General a modificar al alza las subvenciones. La Consejería de Educación garantizó que la subida ya está completada en los presupuestos de 2020 para que sea efectiva en el curso 2020/21.

Puestos de trabajo en peligro

La información sentó como un jarro de agua fría en el sector, que había hecho cuentas para que el curso que comenzará el próximo 2 de septiembre se pudiera mantener la plantilla de los centros y, sobre todo, su funcionamiento con los nuevos ingresos.

A una semana de que las escuelas infantiles abran sus puertas, el panorama que describen algunas asociaciones resulta bastante desolador. Así, la Coordinadora de Escuelas Infantiles de Andalucía (CEI-A) alertó ayer de que, de mantenerse el referido precio un curso más, cerrarán 1.770 centros en toda la comunidad. En ellos se atiende a niños de entre 0 y 3 años, una etapa en la que la escolarización no es obligatoria.

Para aportar este dato, la asociación ha elaborado un estudio de viabilidad económica. El resultado del informe demuestra que las escuelas tendrán que soportar pérdidas que oscilan entre los 12.000 y 21.000 euros. María del Rosario de la Peña, presidenta de CEI-A, explica que este déficit obedece al descenso de las matriculaciones (baja la natalidad y, por tanto, la demanda) y el incremento de hasta un 22% de los costes laborales.

Sin variación en una década

El estudio ahonda en más cifras. Desde 2009 el precio de la plaza pública y de convenio de las guarderías se ha mantenido en 278,88 euros, tarifa que incluye asistencia socioeducativa y comedor. Este coste, si se tiene en cuenta la subida del IPC, del IVA y del SMI, tendría que ser equivalente en 2019 a 368,36 euros, es decir, un 32% más. De la Peña ha incidido en que “la supervivencia ya es imposible, por lo que o nos dan una solución los próximos días o tendremos que tomar una decisión drástica”. “De continuar así nos veremos en la ruina”, ha asegurado la presidenta de esta asociación, que como ya hicieron otras hace menos de un mes exigen al departamento que dirige Javier Imbroda que articule alguna medida que permita el aumento.