El hombre acusado de agredir sexualmente a una mujer que recogió en una parada de taxi, a la salida de una discoteca en Sevilla tras hacerse pasar por un taxista, reconoció este jueves los hechos ante el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia Provincial y el Ministerio Fiscal, en sus conclusiones finales, rebajó la pena de 12 a cinco años y un mes de cárcel.

Este hombre, que lleva en prisión preventiva por estos hechos desde hace año y medio, reconoció que el 17 de agosto de 2018, cuando contaba con 24 años y con antecedentes por robo, recogió a la víctima de 26 años y a su hermana en una parada de taxi, ofreciéndose a llevarlas donde quisieran por cinco euros y que durante el trayecto, tras dejar a su hermana en otro municipio, llegó a un descampado donde consumó la violación.

Por su parte, la víctima relató que al principio del trayecto “fue simpático” pero después se volvió “agresivo”. “Me dio la sensación de que iba bajo los efectos de las drogas por su actitud y porque parecía otra persona”, señaló esta mujer, quien recordó que “conducía rápido y sin empatía”.

Así, tras reconocer los hechos, la Fiscalía le rebajó la pena a cinco años y un mes de cárcel e incluyó la atenuante de drogadicción y de reparación del daño, ya que este hombre ha consignado 5.000 euros como responsabilidad civil.

Por su parte, la acusación particular se adhirió a esta petición sin la aplicación de la agravante de reincidencia porque le consta otras dos agresiones sexuales ya juzgadas pero que fueron posteriores a esta, al igual que su defensa, ejercida por el letrado Alberto Castejón. Por último, en su turno de palabra, el acusado pidió perdón a la víctima y aseguró sentirse “muy arrepentido” de lo que hizo. El juicio quedó visto para sentencia.