El sargento Manoel Silva Rodrigues no tomó ninguna precaución a la hora de transportar la cocaína que llevaba en su maleta. No hizo por taparla ni camuflarla entre su equipaje y la maleta venía repleta de droga. Así puede verse en las fotos que ha hecho públicas este viernes la Guardia Civil de Sevilla, que detuvo al militar del Ejército del Aire brasileño cuando hizo escala en el aeropuerto de San Pablo, formando parte de la comitiva oficial del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.

La droga intervenida.

La maleta llevaba 37 paquetes de algo más de un kilo de cocaína cada uno. En total se intervinieron 39 kilos de esta droga, que el militar brasileño tenía pensado entregar a algún contacto en España. Cuando quiso salir del aeropuerto con el bulto, la Guardia Civil lo hizo pasar por el control de equipajes del aeropuerto y encontró los estupefacientes.

Manoel Silva fue detenido el pasado 26 de junio e ingresó en prisión provisional al día siguiente. La droga que traía está valorada en aproximadamente 1,3 millones de euros. Silva formaba parte de la tripulación del avión de reserva del presidente de Brasil. El vuelo hizo escala en Sevilla cuando se dirigía a Osaka para que el mandatario brasileño participara en la cumbre del G20.

El narcotest que se le pasó a la cocaína en el aeropuerto.

La cocaína venía envuelta en una serie de paquetes de color amarillo que ocupaban todo el interior de la maleta. Esta manera de proceder, sin buscar nada que camuflara la carga, revela la confianza que tenía el militar brasileño en que no iba a tener que pasar ningún control por formar parte de la comitiva presidencial. Se investiga ahora si pasó más droga en los viajes oficiales. Silva participó en 29 viajes con tres presidentes brasileños desde 2011.