Una semana típica de verano la que se presenta en Sevilla. La provincia vivirá los próximos días noches tropicales que harán difícil la conciliación natural del sueño. Será necesaria la ventilación artificial para poder dormir, ya que se esperan mínimas de 25 grados, mientras que las máximas se situarán en 41. 

Si hasta ahora el calor -salvo contadas jornadas- había dado una tregua por la noche, a partir de este lunes también estará presente en las madrugadas sevillanas. Así lo pronostica la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que prevé mínimas que no bajarán de los 22 grados durante la semana, un fenómeno que se conoce como noche tropical y que en Sevilla suele ser habitual en esta época del año. 

Pronóstico meteorológico de Sevilla del 13 al 19 de julio.

Durante el día las máximas continuarán con la tónica de las jornadas anteriores. Así, este lunes el termómetro llegará a los 39 grados de media, aunque habrá localidades, como Écija, donde se supere esta marca. La Aemet ha activado la alerta amarilla, que continuará los próximos días. Sólo el miércoles habrá una pequeña tregua, apenas imperceptible, cuando el mercurio baje un grado y se sitúe en los 38 de máxima 

El jueves y viernes serán los días de más calor, con 41 y 40 grados, respectivamente. A partir del sábado el termómetro se suavizará, ya que no se superarán los 38. 

No obstante, estas máximas ya se han alcanzado días atrás, en los que se han llegado a los 42 grados. La novedad de esta nueva semana radica en las mínimas, que serán especialmente altas. A partir de mañana marcarán los 24 grados, por lo que se rompe la barrera natural del sueño, establecida por los expertos en 22/23 grados. La noche de más calor será la del jueves, cuando el termómetro no bajará de los 25 grados. 

Imposible conciliar el sueño de forma natural

Será necesario, por tanto, hacer uso del ventilador o del aire acondicionado para descansar, lo que, a la postre, supone también un elevado gasto del consumo eléctrico, habitual también por estas fechas. 

Deberá tenerse cuidado especialmente con la población de riesgo: personas mayores, niños, embarazadas y enfermos. Los expertos aconsejan en estos casos mantener lo más fresco posible el dormitorio. Así, a primera hora de la mañana debe ventilarse para que cuando el sol se sitúe en lo alto se cierren ventanas y se echen las persianas, para reducir de esta forma el efecto del calor a lo largo del día. 

Las dificultades para conciliar el sueño durante la noche provocan cansancio y estrés acumulado, aspectos que deben tenerse en cuenta, especialmente, cuando al día siguiente hay que ponerse al volante. De ahí la importancia de refrigerar convenientemente las habitaciones para dormir.