Sanz gastó más de 13 millones en 2024 sin la fiscalización previa de la Intervención

Hacienda

La funcionaria expone en un informe que los expedientes tramitados con resoluciones contrarias a los reparos rozaron los 19 millones

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Detalles del informe de la interventora.
Detalles del informe de la interventora. / D. S.

“Se adjunta anexo con una relación de los expedientes tramitados durante el ejercicio 2024 con omisión del trámite de fiscalización previa”. La suma de ese listado supera los 13 millones de euros. Esta es una de las principales conclusiones que destaca la Intervención General en el informe anual de las resoluciones y acuerdos adoptados por el presidente de la Corporación contrarias a los reparos formulados, así como los informes de omisión de la función interventoras y resumen de las principales anomalías en materia de ingresos el año pasado.

La interventora expone que los expedientes con omisión del trámite de fiscalización previa pertenecen a distintas entidades como el Ayuntamiento de Sevilla, la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente, el Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS), el Instituto Municipal de Deportes (IMD), el Consorcio de Turismo, el patronato del Real Alcázar y la Agencia Tributaria de Sevilla. Entre los documentos destacan los importes que superan el medio millón de euros para el gasto en personal y contratación para abonar retribuciones, servicios y suministros.

En el informe al que tuvo acceso este periódico, Sara Hernández Ibabe expone que las resoluciones adoptadas por el presidente de la entidad local contrarias a los reparos efectuados por la Intervención roza los 19 millones de euros, la mayoría relacionada con las productividades de la Policía Local. En el resumen de las principales anomalías detectadas en materia de ingresos de carácter no tributario se incluyen dos anomalías por un importe de 647.457 euros, una detectada en el organismo autónomo del patronato del Real Alcázar y otra en el IMD.

En un segundo informe en el que se resume las actuaciones de control interno efectuadas por la Intervención General, Sara Hernández Ibabe lamenta que “a pesar de haberse instado, no se han provisto nuevos recursos humanos para acometer con la profundidad y amplitud requeridas el conjunto de controles propuestos”.

El expediente tiene un capítulo, dentro de las conclusiones y recomendaciones, en el que se destaca las deficiencias que requieren la adopción de medidas correctoras a través de un plan de acción.

“No existen resultados de los expedientes de control financiero incoados, por lo que no se han podido recomendar la eventual corrección de las deficiencias que se detecte”. Sobre los últimos controles financieros efectuados (en el año 2021) se determinaron las siguientes deficiencias en materia de personal que precisaban de un plan de acción ordenado a su corrección que pueden resumirse en las siguientes:

1. La confusión existente entre productividad y gratificaciones, problema que podría calificarse de estructural en el colectivo de Policía Local.

2. La existencia de una duplicidad de complementos específicos, pues no es posible, a la vista de la legislación actual, su percepción simultánea en determinados colectivos.

3. La complejidad en la composición de las nóminas de los empleados de la Corporación, pues, a pesar de que las retribuciones públicas deben ajustarse al marco legal vigente, existen hasta 64 conceptos retributivos de abono diferentes.

4. La falta de racionalización en los recursos humanos que determina la existencia de puestos, algunos de ellos sin función alguna en la estructura y otros con asignación indistinta, lo que provoca graves disfunciones en la organización.

5. La necesidad de armonizar y coordinar los medios personales de los entes dependientes y sociedades mercantiles pues, todos los convenios colectivos, incluyen una diversidad de composición y elaboración de las nóminas. “Por otra parte, y como se viene indicando, es de difícil justificación que casi todos los organismos dependientes dispongan de su propia regulación laboral, pues ninguno de ellos posee una estructura que justifique su existencia”.

6. La falta de control del absentismo y sistemas de control horario que aseguren el cumplimiento de las jornadas ni tampoco registros de horas extraordinarias que permitan.

7. El alto índice de temporalidad para puestos de naturaleza estructural.

Lamenta la falta de personal para realizar un control interno en profundidad

Al igual que en materia de personal, en materia de ingresos del Ayuntamiento de Sevilla, el último control financiero realizado ese mismo año puso de manifiesto como principales deficiencias las siguientes:

1. Falta de identificación correcta en algunos de los sujetos pasivos analizados con deficiencias en los NIF.

2. Existencia de deudas tributarias pendientes de cobro siendo el sujeto pasivo el propio Ayuntamiento de Sevilla.

3. Falta de documentación justificativa de la interrupción de los expedientes de prescripción de valores.

4. Falta de traslado de documentación que permita analizar adecuadamente los procedimientos de cobros por compensación.

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