El nuevo pulmón verde de Los Remedios estará dotado de algo que se echa muy en falta en la Sevilla actual: sombra, mucha sombra. Más de un 70% de la superficie del nuevo parque que se creará en el entorno de la antigua fábrica de tabacos de Altadis lo cubrirán los 500 árboles con los que contará dicha zona, cuya reurbanización exterior comenzará a principios de verano, según las previsiones que maneja el grupo de inversión inmobiliaria KKH, que se hizo con tales terrenos. El paisajista español Gustavo Marina es el autor de una propuesta con la que se pretende que este barrio se abra al río y también que la ciudad cuente con un "nuevo centro" pensado para el disfrute de los sevillanos. 

La reforma de la extensa parcela que ocupó Altadis durante décadas va mucho más allá de un hotel de máximo lujo y los edificios de oficinas. Pretende convertir un enclave cerrado y de espaldas a la dársena del Guadalquivir en un gran parque que englobe los tres jardines existentes hasta ahora, así como configurar un gran paseo junto al río. Para conseguir este propósito resulta fundamental disponer de un elemento clave para combatir los meses de calor en Sevilla, la anhelada sombra de la que tanto se ha privado a los nuevos espacios urbanísticos y muchos de los que se han reformado. 

Ha sido el aspecto en el que más ha incidido este viernes Gustavo Marina durante la exposición realizada sobre el nuevo parque. A dicho han acudido, entre otros, la delegada de Parques y Jardines, Evelia Rincón; y el consejero ejecutivo de KKH, Oriol Balaguer. El paisajista es consciente de la polémica que han generado en la ciudad intervenciones en las que no se ha contado con recursos naturales para combatir los más de 40 grados que se sufren en la capital andaluza durante los meses de verano. Una situación que se agravará los próximos años, según vaticinan los expertos en cambio climático. Un ejemplo bastante cercano es el entorno donde se ha celebrado la rueda de prensa. Los bajos del Paseo del Marqués de Contadero y el aspecto que ofrece actualmente el Paseo de Colón en dicho tramo, una reforma acometida la década pasada y falta de sombra. 

Presentación del nuevo parque en Altadis

La lucha contra el cambio climático

El grupo KKH tiene claro que esto no puede ocurrir en los antiguos terrenos de Altadis, de ahí que se haya hecho una apuesta por conservar los 232 árboles existentes -tras un exhaustivo análisis sobre su estado- y prever la plantación de 279 nuevos. Cuando el parque esté acabado contará con 511 ejemplares. Esta cifra aumenta al tener en cuenta los metros cuadrados de sombra que proyectan, los cuales se elevan a 31.300, o lo que es lo mismo, el 71% de esta zona verde estará protegida del sol, lo que hará compatible su disfrute en época estival. 

Plano de las actuales zonas verdes en el entorno de Altadis.

Se dotará, por tanto, a Los Remedios (un barrio muy "compactado", algo propio del urbanismo tardofranquista) de un segundo pulmón (el primero es el del Parque de los Príncipes). En él habrá zonas reservadas para el ejercicio físico (con pistas deportivas) y el esparcimiento canino. Los jardines ya existentes, como el de las Cigarreras o Manuel Ferrand, verán aumentados sus recursos naturales. El resultado, en cifras, supone 13.378 metros cuadrados de zonas verdes estrictas, que incluyen 1.626 de jardines, 5.435 de césped y 6.078 de arbustos y árboles. En estos últimos adquiere gran protagonismo el naranjo, ya presente en el enclave y, en su mayoría, en buen estado. La propuesta también otorga especial importancia a la presencia del agua, a través de láminas que se distribuirán por distintos lugares para que los usuarios tengan siempre la sensación de frescor. 

Plano de cómo quedará el entorno de Altadis y el recinto fabril tras la reurbanización paisajística.

Será, por tanto, un auténtico oasis que servirá de transición entre un barrio colmatado de ladrillo y hormigón y una orilla del río cegada por el diseño de la antigua Altadis. En este sentido, el proyecto elimina cualquier barrera visual. Se derribará el muro que rodea al antiguo recinto tabacalero y las vallas que distribuían el espacio. El resultado es una nueva superficie diáfana, que permitirá a los vecinos de Los Remedios contemplar el Guadalquivir desde prácticamente el corazón del barrio.

Una gran plaza

Con tal fin, además de la reurbanización exterior, es fundamental la reforma interior, en la que deben destacarse dos intervenciones de gran importancia. Por un lado, los jardines sensoriales (donde el olor e incluso el sonido cobrarán protagonismo a través de distintas especies florales), que se plantarán delante del futuro hotel de cinco estrellas de máximo lujo (aún no se ha adjudicado a ningún operador internacional). Las obras de dicho establecimiento ya han comenzado. Y por otro, la gran plaza pública que se creará entre el edificio El Cubo -de gran valor arquitectónico- y la capilla donde radica la Hermandad de las Cigarreras. Un enclave que también dispondrá de árboles y zonas de sombra. Sin olvidar la avenida que cruzará en vertical este recinto y que dejará a un lado el establecimiento turístico y El Cubo. 

El nuevo espacio contará con carril bici en doble sentido y con el máximo ancho permitido, así como con 142 plazas de aparcamiento para estos vehículos. Un dato a recordar es la intervención que comenzó hace un año en la ribera del Guadalquivir, a la altura de la antigua fábrica y donde se instalará la pasarela perpendicular que conectará este enclave de Los Remedios con el Casco Antiguo. 

Recreación virtual de uno de los nuevos paseos.

Las obras en el entorno de Altadis supondrán una inversión de cinco millones de euros, cantidad muy similar a la que se gastará en la pasarela que unirá el Palacio de San Telmo con el nuevo parque. En el proyecto global el desembolso de KKH alcanzará los 250 millones. Se prevé que todo el conjunto esté acabado a finales de 2026. Para entonces, estarán listos el nuevo hotel, los tres edificios de oficinas, El Cubo, la plaza cívica y la referida pasarela. El parque estará listo un año antes, en el último trimestre de 2025. 

Referencias mundiales

La reforma del antiguo espacio fabril toma como modelo actuaciones similares con diseño medioambiental llevadas a cabo en distintas ciudades del mundo. Entre ellas, debe destacarse el proyecto High Line, en Nueva York, diseñado por el británico Norman Foster; el Parque Martin Luther King, en París, obra de Francois Grether y Jacqueline Osty; o el Shanghái Shipyard Riverside Park, en China, del estudio de diseño Land Collaborative (DLC). 

Para este ambicioso proyecto -que supone abrir al público un recinto privado-, el grupo de inversión KKH (con sede en Barcelona) ha contado con la colaboración de GM Paisajistas, dirigida por el mencionado Gustavo Medina, con más de dos décadas de experiencia en tales cometidos; Buró 4, compañía sevillana liderada por Ramón Cuevas, especializada en el desarrollo de proyectos de planificación y ejecución urbanísticos; y Plan VE, consultora que centra su labor en los ámbitos de la arboricultura, la jardinería y el paisajismo.