Un trastorno de personalidad marcado por una infancia atroz
Retrato del asesino
El acusado del crimen de la Alameda sufre un trastorno de personalidad, pero no es ningún enfermo mental, según los psiquiatras que se entrevistaron con él en la cárcel en dos ocasiones.
José Antonio H. G., de 28 años, es impulsivo, "tiene poca tendencia a reflexionar y no mide las consecuencias de sus hechos". Además, tiene "miedo a la soledad y al abandono", por lo que necesita las relaciones y el contacto para ser considerado. "A veces tiene el ego muy alto y otras muy bajo, según su estado afectivo. Pasa de considerarse de especial valía y magnificar sus logros a considerar que su vida es una mierda, utilizando la frase que nos refirió en una de las entrevistas", indicó uno de los especialistas, jefe de Psiquiatría Forense del Departamento de Medicina Legal de Sevilla.
El acusado quedó huérfano de madre a los tres años y su padre lo maltrataba y violaba reiteradamente, por lo que se crió en centros de acogida. Su hermano se suicidió en prisión hace unos años. En el momento del crimen, José Antonio H. G. había aprovechado un permiso penitenciario para fugarse del penal de El Puerto de Santa María. Sin embargo, los psiquiatras no creen que sea un enfermo, aunque sí admiten que la ira que lo llevó a asestar 59 puñaladas se produjo porque hubo un desencadenante y que esa reacción colérica pudo ser mayor que en otras personas.
Por ello, el abogado defensor, Javier Toucedo, considera que es autor de un delito de homicidio pero con los atenuantes de arrebato y confesión, por lo que pedirá para él una pena de entre 5 y 10 años de cárcel, mientras que el fiscal pide 23 por asesinato.
No hay comentarios