El Sevilla Atlético ha sumado tres puntos de un tremendo valor en su lucha por huir del grupo de equipos que pelearán por evitar el descenso. El filial sevillista ha derrotado en la mañana del domingo al Recreativo Granada por dos goles a cero gracias a los tantos anotados por Valentino y Casas en un partido tremendamente competido y que deparó ocasiones claras de gol para ambos contendientes. Al final, los sevillistas aprovechaban su dominio de las áreas para contabilizar tres puntos más en su casillero.

Y lo del dominio de las áreas no es una frase hecha en este caso, ya que las intervenciones del guardameta Alfonso fueron decisivas para el resultado final por mucho que los locales también tuvieran ocasiones clarísimas para haber anotados más tantos. Pero la jugada clave llegaría en el minuto 64, cuando un derribo de Kibamba sobre Migue García dentro del área amenazó con enturbiar el buen partido de los hombres de Paco Gallardo.

El central africano se libró de la segunda tarjeta amarilla por la falta, pero su equipo no pudo evitar que se señalara un penalti clarísimo. Pero ahí se engrandeció la figura de Alfonso, que se lanzó como un felino para detener el lanzamiento del propio Migue García. Increíblemente, y valga el inciso, el propio Alfonso vio tarjeta amarilla en el minuto 33 del primer periodo por supuesta pérdida de tiempo.

El Sevilla Atlético se había adelantado en el marcador muy pronto con un gol de bella factura. Un saque de esquina puesto en el corazón del área por Luismi Cruz con tensión fue cabeceado impecablemente por Valentino, lateral derecho titular en este partido para que José Ángel se fuera a su puesto natural de central para cubrir la ausencia de Eliseo.

El filial sevillista tenía, pues, ventaja y el partido fue equilibrado durante la primera mitad, pero se desataría ya en el segundo periodo para que los dos equipos tuvieran ocasiones clarísimas para haber marcado desde que Ángel le hizo un paradón a Isaac nada más reanudarse el juego. Iván tuvo también una diáfana antes de que Isaac estuviera a punto de anotar desde el centro del campo. 

Y ya al final era Casas el que tenía otra opción para el dos a cero antes de la jugada definitiva, cuando Iván le puso un balón profundo a Juanlu y éste, en un excelente partido global, tuvo la clarividencia para darle el gol hecho al delantero. Casas anotaba el tanto definitivo y el Sevilla Atlético conseguía un triunfo fundamental. Seis puntos en dos encuentros y el filial nervionense respira profundo en su lucha por huir de la zona más peligrosa de la clasificación, aunque todo esté tremendamente igualado todavía.