Jules Koundé, que fue expulsado en el primer partido de Francia de esta jornada FIFA, ha sido suspendido con dos partidos, por lo que, tras cumplir uno de ellos en el último partido de la selección gala frente a Ucrania, tampoco podrá jugar este martes ante Finlandia un duelo en el que el equipo bleu necesita despejar muchas dudas sobre su futuro. 

El defensa sevillista, visiblemente descentrado desde que se frustró su fichaje por el Chelsea, vio la roja directa por una dura entrada a un jugador de Bosnia-Herzegovina. Su castigo ha sido de dos partidos y Koundé ha preferido no volver antes de tiempo a Sevilla y quedarse con sus compañeros de selección en vez de regresar y preparar el duelo ante el Barcelona que estaba previsto para este sábado.

El compromiso del futbolista una vez que debe aceptar que ha de quedarse una temporada más en el Sevilla es algo que preocupa de alguna manera en el club. Koundé ya se negó a viajar a Elche en el último partido liguero antes del parón alegando que no se encontraba anímicamente bien. 

Incluso en rotativos británicos, como The Mirror, se asegura que no atiende las llamadas telefónicas que se le hacen desde el club. Pese a ello, hay tranquilidad en el Sevilla y varios futbolistas como Diego Carlos y Rakitic han aclarado que el jugador demostrará su profesionalidad cumpliendo su contrato y darlo todo por el club.