"Vamos a mirar para delante con optimismo y a olvidar las lesiones". La frase, dicha con la voz rota por las emociones del derbi, corresponde al análisis que hizo Monchi al término del Sevilla-Betis ante lo micrófonos de Movistar LaLiga. El director general deportivo del club nervionense es el primero que está al tanto de todas las incidencias que viene sufriendo la plantilla sevillista en los últimos cuatro meses, desde que las lesiones fortuitas de Suso y Lamela abrieran una racha continua de incidencias entre dolencias musculares y positivos en Covid en plena ola de ómicron. El invierno ha sido durísimo para el Sevilla en el aspecto médico y físico. Y pese a que todavía hay varios integrantes en la enfermería y lo del Papu es un serio inconveniente, se va aclarando el panorama. Esto, unido al triunfo liberador del derbi, ilumina al Sevilla.

Marzo, con su temprana primavera y los naranjos ya floreciendo, llega con otra luz para el equipo de Julen Lopetegui, que afronta un tramo de competición que se presenta más amable y no sólo en lo climatológico. Antes de que irrumpa de forma astronómica la estación por antonomasia de Sevilla, los nervionenses afrontan varios partidos de exigencia, pero no son rivales inasequibles, aunque entre estos está el West Ham, el contrincante menos deseado en el sorteo de la Europa League según confesó el propio Monchi. Alavés, este viernes en Vitoria; Rayo, el domingo 13 en Vallecas y la visita de la Real Sociedad al Ramón Sánchez-Pizjuán el domingo 20 son los tres partidos de Liga que les trae el mes de marzo a los sevillistas, con la cita de octavos de final europeos entre el 10, en Nervión, y el 17, en Londres.

Antes de que irrumpa plena la primavera, el Sevilla afronta cinco partidos oficiales, ya que tras el de la Real Sociedad llega el último parón liguero antes de las últimas nueve jornadas. Y parece que el ánimo en el vestuario no sólo encuentra nuevos bríos con el paulatino regreso de lesionados, con la buena nueva de Lamela como principal novedad y motivo de alegría. Y con esa nueva energía el Sevilla tiene que dar otro paso tras lo exhibido en la primera parte ante el Betis: ganar a domicilio después de muchísimo tiempo, concretamente desde el 2 de enero en su visita al Cádiz. Incluso en Zagreb pasó con derrota...

En ese brío tiene mucho que ver, obviamente, el triunfo liberador del derbi. "Menos mal", dijo Lopetegui aliviado camino de los vestuarios, como se aprecia en el vídeo publicado por el club sobre el derbi desde dentro. Había mucha tensión contenida desde la eliminación de la Copa. Y las bajas y dudas del equipo, con pilares del once sin poder participar, habían subido esa tensión. Quizá ahí, junto a que era el primer derbi con público en Nervión para este grupo desde 2019, está la razón de la celebración por el triunfo por todo lo alto, vuelta olímpica al estadio incluida.

En lo estrictamente objetivo, Lopetegui aún tiene que lidiar con el asunto de las bajas, por mucho que invite a olvidar las lesiones Monchi. Diego Carlos jugó forzando, Papu Gómez se lesionó en el partido, Rekik aún no está, ni tampoco Suso... Pero en Vitoria estarán ya Koundé y Ocampos, por ejemplo, tras sus bajas por sanción en el derbi. Serán dos altas importantísimas teniendo en cuenta el estado de Diego Carlos y la lesión del Papu, muevo motivo de inquietud en la enfermería sevillista: su lesión preocupa y cae cuando más influencia tenía en el equipo.

Con Tecatito Corona confirmado como un valor al alza de este redivivo Sevilla, después de romper el partido a favor en el derbi con su juego, sus diagonales, sus combinaciones y la gran jugada que propició el penalti del 1-0, queda por ver si Martial se reincorparará al equipo. Fue otra de las bajas importantes en el derbi, pese a que Lopetegui lo esperó e incluso lo preconvocó entre los futbolistas que se concentraron en el Meliá Lebreros. Finalmente no fue citado, pero podría estar para Vitoria.

Este viernes empieza este nuevo ciclo de marzo, iniciado con la buena nueva del regreso de Lamela al grupo, aunque aún no estará disponible. La puesta en escena ante el Betis y el triunfo pese a los muchos inconvenientes y esa tensión acumulada son también motivos de esperanza. Ahora queda que el Sevilla se deje iluminar por esa luz y que los altos retos no lo deslumbren.