Menos de dos semanas quedan ya para que arranque una temporada que parece que no llegará nunca, de dilatado que está siendo el paréntesis estival. Y menos de un mes resta para que se cierre el mercado. El tiempo empieza a jugar en contra, pues, de Monchi en su peliagudo propósito de aligerar la nómina de la plantilla sevillista.

Hay jugadores que no cuentan ni con minutos de pretemporada: Arana, Sergi Gómez, Amadou, Roque Mesa. A los cuatro debe buscar acomodo el director deportivo y en ello anda. Hoy, quien tiene más visos de salir es Sergi, el central catalán que el Espanyol maneja como opción para relevar a Hermoso.

Luego, hay otro grupo de jugadores con el cartel de transferibles que disfrutan de una suculenta ficha y a los que Julen Lopetegui está poniendo en el escaparate durante sus ensayos: el propio Kjaer jugó el sábado ante el Hoffenheim por delante de Koundé o Diego Carlos, que entró por el danés cuando se lesionó.

En este grupo se enmarcan también Sergio Rico, Corchia, Nolito y hasta Ben Yedder. En todos los casos, el Sevilla pretende ingresar dinero por sus traspasos –en torno a 40 millones en el caso del delantero franco-tunecino, la piedra angular para esa esperada bomba de final de mercado– y aligerar fichas. Entre los transferibles que están jugando, despunta Nolito, autor de seis de los 19 goles del Sevilla en esta pretemporada.

El sanluqueño encaja en ese 4-3-3 de Lopetegui como falso extremo izquierdo. Le queda un año de contrato con el Sevilla, cuya posición para negociar es débil, el Celta ha acordado con el jugador dos años más uno opcional y pretende dejar pasar el tiempo para que el club de Nervión se vea forzado a dejarlo volar a Vigo sin percibir un solo euro de traspaso. Mientras, en el vestuario olívico se impacientan e incluso pesos pesados como Aspas y Hugo Mallo presionan a su club para que su ex compañero retorne.

Ocurre que Nolito, con su juego, está abriendo un nuevo escenario: arma al Sevilla en su posición de exigir algún milloncejo al Celta para traspasarlo y, por otra parte, hace dudar a Lopetegui de si realmente no le será útil en su proyecto. Por si no hubiera incertidumbre en las salidas del Sevilla, Nolito se pone a jugar...