Una de las paradojas de la planificación del Sevilla 22-23, una de las incongruencias acentuando la crítica, es que su máximo goleador cuando la Liga va por la octava jornada está fuera de la Champions. El Sevilla viajará este lunes a Dortmund sin Óliver Torres, el artífice del gol ante el Athletic Club de Bilbao, el tercero en su cuenta, lo que en la magra estadísticas de goles de este equipo lo convierte en su máximo anotador. Puede ser meramente un hecho circunstancial, una casualidad dolorosa. Pero ahí está la paradoja.

¿Quién decidió que Óliver Torres se quedara fuera de la Champions? Julen Lopetegui fue preguntado por quiénes serían los descartes de la lista A, en la que no cabían todos los profesionales del primer equipo, al tener que dejar el Sevilla tres huecos para canteranos, ya que sólo consta en este apartado Jesús Navas. El técnico, víspera del Sevilla-Barcelona, coincidiendo con el plazo de la UEFA para las inscripciones, fue preguntado si tenía decidido el otro descarte además del lesionado Tecatito Corona: "Sí, será el club el que lo comunique". Una semana antes había marcado en Almería y no jugó ante el Barça. Sin embargo, ha sido titular desde entonces, desde que se quedó fuera de la lista A, en todos los partidos de Liga, con Lopetegui y ahora con Sampaoli.

El club esperó hasta el domingo 4 de septiembre y oficializó la lista poco después de que ya lo publicara en su web la propia UEFA. El elegido había sido Óliver Torres. Y no parece que las razones fueran por rendimiento. Quizá por reparto de roles y perfiles en la plantilla, como argumentó Monchi en una de sus comparecencias. Pero por rendimiento... El extremeño fue suplente en Pamplona y titular ante el Valladolid y en Almería, donde marcó un golazo de cabeza, el primero de su cuenta. El segundo gol lo marcaría en Villarreal, con un tanto similar al que hizo al Athletic, esta vez con pase atrás de Isco en lugar de Montiel.

Dos de sus goles han servido al Sevilla para puntuar, al menos, ante dos presumibles rivales directos, aunque la lucha del equipo de Sampaoli ahora no está en mirar hacia arriba. Hoy caerá a puestos de descenso una vez que se juegue el Cádiz-Espanyol y haya reparto de puntos en la octava jornada.

Lopetegui fue padrino del fichaje de Óliver Torres, al que ya tuvo en el Oporto. Nunca ha sido un futbolista protagonista, con continuidad ni regularidad: no ha sido un pilar del Sevilla de Lopetegui. Pero sí ha mostrado siempre sus pinceladas de calidad, su talento para ver los espacios, para llegar y aportar golitos con cuentagotas. A ello suma su bonhomía, su carácter afable y poco rebelde. Y puede que esto también influyera en la decisión, porque en el reparto de roles que podría argüir Monchi está por delante de otros mediocampistas o medios ofensivos cuya aportación es mucho menor actualmente.

Sea como fuere, la realidad se obstina en seguir castigando la pésima planificación de esta temporada. Y es hasta doloroso ver cómo el máximo goleador del Sevilla no puede jugar en la Champions, que por otro lado parece que esta temporada será de nuevo un torneo imposible para este equipo.