El Sevilla ha caído con justicia en la Europa League ante el West Ham, cuya presión adelantada ha impedido al once de Lopetegui estar cómodo en el partido. Apenas Tecatito Corona y Óliver Torres han encontrado las vías que no veía un centro del campo obturado ante el hostigamiento del rival.

Bono. Salvó de un par de goles más y anduvo firme por arriba. El bote del balón le resultó imposible en el 2-0.

Jesús Navas. Le costó tomarle el pulso al partido, pero cuando se entendió con Tecatito sí dio salida y creó peligro.

Koundé. Firme en líneas generales, intentó salir cuando pudo, pero acabó también perdiendo el sitio cuando apretaron los ingleses.

Gudelj. Le tocó lidiar con Antonio y perdió la batalla en el cuerpo a cuerpo. Sí estuvo bien en cruces y bloqueos providenciales.

Augustinsson. Se fue diluyendo tras una primera parte muy prometedora, tiene el infortunio de quedar retratado en los goles.

Joan Jordán. Irregular. Balones verticales con peligro y pérdidas peligrosas. No le cogió el pulso al partido.

Delaney. Regaló el balón del 1-0 y se vio superado más de una vez, pero siempre estuvo atento y apagó fuegos.

Rakitic. Totalmente superado por el ritmo del partido. Ni construyó ni presionó.

Tecatito Corona. Valiente siempre, fue el principal arma para salir de la presión con sus controles y sus giros. Raro que fuera el segundo cambio.

Martial. Apenas un buen detalle en la ocasión de En-Nesyri. Y muy poco más, sin romper nunca.

En-Nesyri. Tuvo la mejor ocasión. Muy perdido en los balones aéreos, aunque tampoco le ofrecieron mucho y su esfuerzo fue baldío.

Óliver Torres. Le cambió la faz al partido en la segunda mitad, con su distribución. Pero no bastó.

Rafa Mir. Alguna carrera prometedora y poco más. Muy aislado.

Munir. Muy perdido, sin opciones, intentó ayudar a tapar, con poco éxito.

Luismi Cruz. También aislado. Gestionó bien la situación de peligro tras el córner con Bono arriba.

Montiel. Intentó alguna subida, con un par de centros erráticos.

José Ángel. Su entrada coincidió con el gol de Yarmolenko. Poco que hacer ya.