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Un punto menos que en el último descenso: el Sevilla se acerca al abismo

Sergio Ramos falla ante Luis Rioja, que está a punto de hacer el tercer gol.

Sergio Ramos falla ante Luis Rioja, que está a punto de hacer el tercer gol. / Antonio Pizarro

La situación en Nervión es límite. Mientras la dirección deportiva mira al mercado de fichajes en busca de talento joven, la dinámica del Sevilla en LaLiga EA Sports hace temer lo peor en las gradas del Ramón Sánchez-Pizjuán. Tanto es así que recuerda a la última vez que cayó al infierno de la Segunda División, con Marcos Alonso en el banquillo... y un equipo que, a estas alturas, sumaba un punto más que ahora.

La 'suerte' de una pobre liga

Si la temporada 2023/24 se estuviera desempeñando con la 'normalidad' establecida en LaLiga EA Sports en la mayoría de años, el Sevilla estaría en puestos de descenso. Los nervionenses han cerrado la jornada 20 con tan sólo 16 puntos en su casillero y con el temor de que si ganase el Cádiz y puntuase el Celta de Vigo, caería a la zona roja de la tabla.

Tampoco sorprende a nadie, pues la dinámica en liga invita a ello. El Sevilla se encuentra en la peor dinámica de su historia reciente, empeorando, incluso, los números de la última vez que cayó a Segunda División. En la temporada 1999/00, con Marcos Alonso en los banquillos, cerró la jornada 20 con 17 puntos, uno más que en la actual. Eso sí, en aquel año lo hizo como farolillo rojo, posición que no abandonó durante todo el año. Juan Carlos Álvarez asumió el cargo en marzo, pero la suerte de los nervionenses no cambió.

En la presente, el Sevilla ya lleva tres entrenadores distintos en el banquillo y se mantiene a flote -por decir algo- gracias a los deméritos deportivos de los equipos perseguidores. Una realidad dura, pero que cuanto más tarde en asumir, más complicado será salir de ella. Tiempos de crisis absoluta en Nervión.

Quique Sánchez Flores pide explicaciones desde el área técnica. Quique Sánchez Flores pide explicaciones desde el área técnica.

Quique Sánchez Flores pide explicaciones desde el área técnica. / Antonio Pizarro

Del Nido arremete y pide las riendas

Las malas dinámicas no tienen nunca un sólo culpable. Sin embargo, la directiva es la gran señalada por una grada cansada y superada por una situación a la que no le ven solución alguna. José María del Nido Carrasco asumió el cargo de presidente del Sevilla el pasado 31 de diciembre, pero poco, o nada, ha cambiado desde entonces. En su corto historial como máximo dirigente ya suma dos derrotas y una victoria, esta en Copa del Rey, números que fortalecen a la 'oposición'.

José María del Nido Benavente, su padre, no ha ocultado jamás su deseo de regresar a la presidencia. Lo ha intentado en numerosas ocasiones, pero la justicia continúa cerrándole las puertas que desea abrir. Por el momento, tan sólo le queda meter presión, como hizo tras el partido. El periodista Álvaro Muñoz recogió unas declaraciones del expresidente nervionense al término del encuentro, en las que le propone al consejo que le dejen asumir las riendas del equipo: "A ver quién levanta esto".

En definitiva, pésimo momento en todas las áreas: deportiva, económica y social. Un estadio cansado, una directiva que no da con la tecla y unos jugadores a los que no les queda crédito alguno.

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