La presidenta del Comité Científico Asesor de la Conselleria de Salud de Cataluña sobre Covid-19, Magda Campins, ha abogado por reforzar la salud pública como una de las medidas para avanzar hacia una "nueva normalidad" en convivencia con el virus SARS-CoV-2, al cumplirse dos años del primer caso detectado de Covid-19 en Cataluña.

Campins ha concretado, que en esta nueva normalidad se tendrá que seguir protegiendo a los colectivos más vulnerables al virus, pero con un sistema de vigilancia epidemiológica distinto al actual a través de centros centinela, sin contar caso por caso ni buscarlos activamente mediante test.

El conseller de Salud de la Generalitat, Josep Maria Argimon, ya ha explicado que desde el Govern plantean un cambio en la gestión de la pandemia desde esta primavera, una medida que Campins ve con buenos ojos y, de hecho, cree que Cataluña tendrá "mejores herramientas" de vigilancia epidemiológica en los próximos meses.

El jefe del Servicio de Microbiología del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, Tomàs Pumarola, que se debe reforzar la vigilancia epidemiológica, pero también la manera de hacerlo y trabajar más en red, una reivindicación que ya hacían antes de la pandemia pero que se ha consolidado estos dos últimos años.

Para la investigadora del grupo Biocom-SC de la UPC Clara Prats, es "importantísimo" tener un sistema de salud pública reforzado porque en los dos años de pandemia ha quedado claro que la anticipación es clave para detectar nuevas variantes e implementar medidas para su control.

Previsión

Prats ha subrayado que hay camino por recorrer ante el Covid-19 para ver la fotografía final de la pandemia, y ha destacado la posibilidad de que sea una "fotografía dinámica" que cambia cada año, como pasa con otras patologías.

Tomàs Pumarola cree que el virus no dejará de transmitirse en el futuro, pero que no generará "demasiados problemas" a la población general, aunque también ha valorado la posibilidad de que tenga más protagonismo en determinadas épocas del año, como en los meses más fríos, lo cual obligará a cambiar las vacunas y a proteger, sobre todo, a los más vulnerables.

Vacunas

En este sentido, Magda Campins ha destacado el desarrollo de las vacunas de segunda generación, que se administran por vía intranasal, que ha descrito como la puerta de entrada del virus, lo que generará inmunidad a nivel local, en concreto en las mucosas de la vía respiratoria.

Esto evitaría la infección y, por tanto, la capacidad de infectar a otras personas, mientras que las vacunas actuales actúan sobre la enfermedad grave, previenen los casos de más riesgo de ingreso en la UCI y la mortalidad, pero no evitan el contagio, lo que ha repercutido en un gran volumen de casos leves en algún momento de la pandemia como en la sexta ola.

Digitalización

Para la presidenta del Comité Científico Asesor de Salud, otro aspecto "urgente" es abordar la digitalización, para disponer de los datos a tiempo real que permitan a los profesionales saber la situación actual y poder escalar las medidas que sean necesarias.

Asimismo, ha asegurado que el departamento está haciendo un "esfuerzo muy importante" para mejorar en digitalización y prevé que en los próximos meses los profesionales tengan más herramientas de información.