Según la información que ha sido publicada por la agencia EFE, un anestesista fue detenido por la policía de Río de Janeiro el 11 de julio, acusado de abusar sexualmente de una embarazada cuando a esta se le estaba realizando una cesárea. La detención tuvo lugar después de que las autoridades fueran alertadas de los hechos sucedidos y de que recibieran un vídeo grabado por personal del centro en el que se daba constancia de la agresión.

Dichas imágenes fueron tomadas por un grupo de enfermeras, quienes en un principio sospechaban que el acusado utilizaba con sus pacientes una dosis superior de anestesia a la que estaba establecida. Según testimonios de otros miembros del cuerpo médico y de enfermería que compartían quirófano con el presunto agresor, este insistía también en que la tela que se utiliza en las intervenciones, con el objeto de separar la parte superior del cuerpo de la paciente, quedara más alta de lo habitual. Presumiblemente se pedía esto para evitar ser visto mientras tenía lugar la agresión sexual, puesto que así se lograba que el rostro de la víctima quedara fuera del campo de visión del resto de presentes.

Un crimen captado en vídeo

Las imágenes del delito, que serían posteriormente presentadas ante la policía de Río de Janeiro y llevaron a su detención, mostraban al médico bajándose la cremallera del pantalón para posteriormente introducir su miembro en la boca de la víctima, quién había sido anestesiada minutos antes del inicio de la agresión.

El acusado, que ha sido identificado como Giovanni Quintella Bezerra, es médico especializado en anestesiología. Según informaciones proporcionadas por la Secretaría de Salud del estado de Río llevaba 6 meses trabajando en diversos hospitales del área metropolitana de Río de Janeiro. Fue esta misma entidad la que finalmente iniciaría los trámites de denuncia ante la policía.

Según informan desde El Universal, la policía sospecha de la existencia de más víctimas de Quintella Bezerra e investigará los casos en los que participó meses antes de la detención. Además, el Hospital de la Mujer Heloneida Studart, en el que tuvieron lugar los hechos, adelantará las investigaciones internas para poder tomar las pertinentes medidas administrativas.