Noemí Martínez, madre de Olivia y presunta asesina de su hija en su piso de Gijón, había denunciado a su expareja hasta 28 veces durante el proceso de separación y custodia, que se alargó 5 años. Este fue el motivo principal por el que la familia del padre, según decían a los medios, no había podido obtener la custodia de Olivia antes. El fin de semana del 28 de octubre, cuando a Eugenio le notifican que finalmente su hija podrá vivir con él con un régimen de visitas compartido con la madre durante los fines de semana y días festivos, Noemí Martínez decide acabar con la vida de la pequeña. Lo que primero se conoció es que Eugenio García había quedado absuelto de todas y cada una de las 28 denuncias que había interpuesto su mujer contra él, aludiendo a malos tratos físicos y psicológicos, agresión y abusos sexuales a la menor o incumplimiento en el régimen de visitas.

La imagen de padre ejemplar quedaba manchada, sin embargo, cuando una semana más tarde el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) desvelara que el motivo por el que Eugenio García no había obtenido antes la custodia radicaba en una condena por malos tratos a su ex mujer que derivó en 9 meses de prisión. Esto sucedió en enero de 2020. Si después la Justicia cambió de postura y le otorgó la custodia a él fue por la intención de la madre de seguir residiendo en Gijón, lejos del círculo familiar y de amistades de la pequeña. "El juzgado ha ido tramitando y resolviendo en todo momento sin demora los procedimientos penales y civiles conforme las partes personadas", sostienen fuentes del TSJCyL.

Ahora, el abogado de Eugenio García, Ignacio Blanco, asegura que va a presentar de manera formal una queja por haber hecho pública esta sentencia, a pesar de que todas las sentencias son públicas. Asegura que con este comunicado lo que se pretenden hacer es blanquear el presunto asesinato de la pequeña Olivia, por eso exigen una rectificación y una disculpa pública. En palabras del abogado, consideran que “el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha podido vulnerar los derechos de nuestro representado, Eugenio García, en lo que aparenta un intento de blanquear el asesinato de la pequeña Olivia, de tan solo 6 años”. Además argumenta que “Olivia no merece que su asesinato pretenda justificarse o enturbiarse con inexplicables comunicados de las instituciones que debieron protegerla y que resulta evidente que no hicieron”.