Causa criminal

Daniel Sancho está preocupado por la repercusión mediática que tiene su caso

La policía de Tailandia pide pena de muerte para Daniel Sancho / Europa Press

La madre de Daniel Sancho ha acudido por segundo día consecutivo a ver a su hijo a la cárcel de Koh Samui, en la que se encuentra desde que confeso ser el autor del crimen de Edwin Arrieta.

La primera visita que Silvia Bronchalo, la madre de Daniel, hizo a su hijo duró una hora y media. Durante su segunda visita, de unos 45 minutos de duración, la mujer confesó que “nadie se espera una cosa así” y que “no nos prepara nadie para esto”. Aun así ha querido agradecer a los medios el interés y el respeto que se está teniendo.

Según parece, Daniel le ha explicado a su madre durante su visita que se vio atrapado, en lo que él denominó “una jaula de cristal” y que por eso habría actuado así. Bronchalo ha asegurado que, a pesar de lo difícil del momento, su hijo se encuentra bien, tranquilo, y espera que todo se resuelva pronto. El chico, a pesar de que no tiene acceso a ver las noticias ni consultar lo que escriben los medios, es consciente de que el delito que ha cometido podría estar penado con la muerte en Tailandia.

En el día de hoy, 18 de agosto, el chef también ha recibido la visita de Vicente Cacho, un trabajador de la Embajada española. Éste ha explicado a los medios de comunicación que el joven se encuentra tranquilo y que posiblemente haga algún comunicado a la prensa. De hecho, lo primero que el presunto homicida ha preguntando ha sido si su caso estaba siendo mediático.

Sigue en la enfermería

Después de que el encausado haya pasado 10 días aislado en la prisión por el protocolo covid para evitar posibles contagios, Sancho debería trasladarse para estar con el resto de presos del centro penitenciario y ser tratado como uno más.

Sin embargo, ahora se ha sabido que el chico sigue en el módulo de enfermería junto a otros cinco presos debido a una hernia discal. Estará ahí a excepción de que se le tenga que aislar por su seguridad (riesgo de agresión de algún preso o suicidio). En la cárcel de Koh Samui hay actualmente reos de diferentes nacionalidad y un solo español.

 

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