Colectivos LGTBI de Galicia han publicado un comunicado tras la muerte de Nerea Arceo Barreiro, una joven de 17 años de La Coruña que se suicidó la semana pasada por el acoso que estaba recibiendo por ser bisexual. 

"Todas y cada una de las personas que la odiaban por ser bisexual, y que se lo demostraron, son sus asesinas", empieza el comunicado de ALAS La Coruña, que continúa asegurando que "se quitó la vida porque no pudo soportar tanto odio".

El acoso se habría producido en sus dos últimos centros educativos, el Centro Público Integrado Os Dices, en Rois, y el CEIP A Maía, en Bertamiráns. "Miraron para otro lado cuando era agredida, por miedo o por indiferencia. Todas las personas con capacidad para actuar, que sabían lo que acontecía, pero que no se posicionaron ni se implicaron lo suficiente, son cómplices de su asesinato", aseguran sobre lo que ocurrió en ambos.

ALAS señala que "es difícil hacer frente o escapar de un entorno hostil, en una localidad pequeña donde todo el mundo se conoce, pero donde nadie, o casi nadie, levanta la voz para defender a quien transita caminos minorizados, a quien va a contra corriente buscando sencillamente ser como es, peleando cada día por su derecho para ser tan feliz cómo cualquiera".