El 25% de las muertes en la carretera se evitarían respetando la velocidad

Una de cada cuatro muertes en accidente de tráfico se evitaría si se respetaran los límites máximos de velocidad, una infracción que causa casi 500 fallecimientos al año y que cometen alrededor de un millón de conductores.

Para reducir estas cifras, la Dirección General de Tráfico (DGT) puso ayer en marcha una campaña de control y sensibilización, que se prolongará toda la semana y que, en colaboración con las policías municipales, vigilará el velocímetro de los coches tanto en carretera como en ciudad.

"Si crees que por correr un poco con el coche no pasa nada, puedes hacer daño a gente que ni siquiera conoces. Como a mi madre, a mi padre o a mí", dice un niño en el spot televisivo que se emitirá con motivo de la campaña, así como cuñas radiofónicas para recordar a los conductores que "el verano está lleno de vida y de vidas. Respétalas".

El subdirector de Gestión de la Movilidad de la DGT, Federico Fernández subrayó que la velocidad está detrás de una buena parte de los accidentes y explicó que la vigilancia se incrementará en las carreteras convencionales, donde tiene lugar el 70% de los siniestros con víctimas.

Como en anteriores ocasiones, a la vigilancia que realizan en carretera los agentes de la Guardia Civil de Tráfico se suma la que desde el aire realiza el radar de la DGT Pegasus, usado sobre todo en las carreteras convencionales.

Más de 30.000 conductores fueron denunciados en la última campaña y un millón lo son cada año.

Aun así, se sigue detectando a conductores circulando con grandes excesos de velocidad, como el domingo 11 cuando en un control de velocidad la Guardia Civil detectó en la R-4 en Ocaña (Toledo) un coche a 233 kilómetros por hora. El jueves, la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife sorprendió a otro a 109 por una calle con limitación a 40.

La DGT recuerda que la velocidad es la primera causa de muerte en carretera, que a 80 kilómetros por hora un atropello siempre es mortal mientras que a 30 el riesgo de muerte se reduce al 10% y que correr más de lo permitido agrava las consecuencias de un accidente.

Incumplir las normas en materia de velocidad está tipificado como infracción grave o muy grave y se sanciona con multas de 100 a 600 euros, así como con la pérdida de entre 2 y 6 puntos del carné.

El artículo 379 del Código Penal tipifica como delito "el que condujere un vehículo de motor o un ciclomotor a velocidad superior en 60 kilómetros por hora en vía urbana o en 80 kilómetros por hora en vía interurbana a la permitida reglamentariamente". Así, será castigado con la pena de prisión de tres a seis meses o a la de multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.