Por qué el Papa no vivía en el Palacio del Vaticano: esta era su residencia

El fallecimiento del Papa Francisco ha marcado la jornada de este lunes 21 de abril, una vez concluida la Semana Santa. El deceso se ha producido a las 07:35 horas en su residencia de la Casa Santa Marta, tal y como ha comunicado el cardenal Kevin Joseph Farrell, camarlengo del Vaticano, poco después. A raíz de lo sucedido, es inevitable recordar los 11 años de liderazgo espiritual, en los que el pontífice ha marcado un antes y un después en la Iglesia Católica.

Originario de Buenos Aires (Argentina), el Papa Francisco fue el primer Papa latinoamericano y Jesuita. Además, se mostró a favor de la inclusión, asegurando que "la Iglesia no tiene las puertas cerradas a nadie" y, entre sus frases más célebres se encuentra la siguiente: "Si una persona es gay, busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla?". También, lejos de la tradicional costumbre, prefirió vivir en la Casa Santa Marta y no en el Palacio Apostólico del Vaticano.

La Casa Santa Marta

Construido en 1589, el Palacio Apostólico del Vaticano es la residencia oficial del Papa. Se trata de un complejo de edificios entre los que se encuentran los apartamentos papales, las oficinas de gobierno de la Iglesia Católica y la Biblioteca Vaticana. Aproximadamente, cuenta con 1.000 habitaciones, que incluyen la célebre Capilla Sixtina, los apartamentos Borgia y las Estancias de Rafael. No obstante, el Papa Francisco rehusó vivir en aquellas dependencias. ¿A qué se debió esta decisión?

El Supo Pontífice estaba totalmente comprometido con la idea de una Iglesia más accesible y humilde; algo que se reflejaba en cada una de sus elecciones. Por ello, se decantó por la Casa Santa Marta (la Domus Sactae Marthae), un edificio levantado en 1996, durante el pontificado de Juan Pablo II, y adyacente a la basílica de San Pedro. Esta residencia es especialmente conocida por acoger a los cardenales electores durante los cónclaves.

Se trata del primer papa en 110 años que ha elegido vivir en un lugar diferente al Palacio Apostólico del Vaticano por preferir un alojamiento más sencillo, más pequeño y menos aislante, en el que poder desarrollar su liderazgo.

¿Dónde será enterrado el Papa?

Francisco modificó el año pasado las normas que rigen el ritual con el que son enterrados los papas para hacerlo todavía más sencillo. Así, una vez certificada su muerte, será expuesto en un velatorio público en la Basílica de San Pedro. Luego, será enterrado en un ataúd de madera con un revestimiento de cinc, que sustituye al tradicional féretro que estaba compuesto por tres capas: de madera de ciprés, de cinc y olmo.

Ya no existe la obligación de que los Papas deban ser enterrados en San Pedro. De hecho, Francisco ha pedido que su cuerpo descanse en Santa María Maggiore (Santa María la Mayor), una de las cuatro basílicas papales de Roma, la primera que visió cuando hace 11 años fue nombrado Sumo Pontífice.