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¿Cuáles son las señales de alerta de un infarto intestinal?

  • Aquí están todas las claves para saber cuando ocurro y cómo afrontarlo

El infarto intestinal necesita asistencia médica

El infarto intestinal necesita asistencia médica / Google

El dolor abdominal intenso, vómitos y fiebres altas son lo posibles síntomas de que se está sufriendo un infarto intestinal, un episodio que ocurre cuando una arteria que lleva sangre para el intestino delgado o grueso se obstruye e impide el paso de la sangre por lo que causa la "muerte" de esa parte del intestino. Otra posibilidad es que suceda en una vena que se obstruya y no deje salir la sangre desde el intestino  el hígado.

Lo más importante a tener en cuenta es que el infarto intestinal tiene cura si se trata a tiempo. Cuando se da, el cuerpo se encuentra en una situación de emergencia y los dolores que se van a sufrir van a ser mucho más fuertes. El factor clave es trasladarse rápidamente al hospital donde los médicos puedan proceder a realizar un diagnóstico y actúen con agilidad, para proporcionar al enfermo el tratamiento necesario.

Para confirmar que se está produciendo un infarto intestinal el personal sanitario puede realizar varias pruebas como resonancias, ecografías, rayos X, análisis de sangre o una endoscopia o colonoscopia.

Síntomas principales del infarto intestinal

Los síntomas más recurrentes cuando el cuerpo ha sufrido un infarto intestinal son los siguientes:

  • Sensación de abdomen hinchado

  • Dolor abdominal intenso que se agudiza con el tiempo

  • Fiebres altas por encima de los 38ºC

  • Diarrea acompañada de sangre en las heces

  • Náuseas y vómitos

Lo más importante es identificar el dolor abdominal intenso, que de perdurar después varias horas debería ser razón para desplazarse hasta el hospital. Puede que los síntomas se prolonguen durante días de forma leve y que al final terminen derivando en un dolor agudo donde sigue siendo esencial la revisión de un profesional.

Posibles causas de infarto intestinal

Este tipo de infarto es poco común pero el riesgo aumenta en personas con estas características:

  • Mayores de 60 años

  • De sexo masculino

  • Niveles de colesterol elevados

  • Que padezcan la enfermedad del Crohn, colitis ulcerativa o diverticulitis

  • Con Neoplasias

  • Con cirugías abdominales

  • Con cáncer en el sistema digestivo

También son más susceptibles de padecerlo mujeres que usan la píldora anticonceptiva o que están embarazadas.

El tratamiento para el infarto de intestino se puede iniciar con una cateterismo que se trata de una cirugía para restablecer la circulación sanguínea. Lo más importante es que el paciente acuda a urgencias cuando el dolor se agudice para evitar que el infarto intestinal llegue a complicarse.

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