El personaje clásico de Don Juan Tenorio sigue muy presente en el imaginario sevillano tratándose del protagonista de varias de las obras más conocidas de la literatura. José Zorrilla plasmó al personaje pero ante, Tirso de Molina le retrato en la obra conocida como 'El burlador de Sevilla'. Aunque otros apuestan que el creador de la figura fue Andrés Claramonte.

Con dudosa descendencia, el Don Juan Tenorio de José Zorrilla convirtió al personaje fanfarrón incrédulo en un héroe con el que todos pueden simpatizar cuando, contra todo pronóstico, termina salvando su alma gracias al amor de Doña Inés. En la obra de este autor las localizaciones sevillanas no pueden faltar y sabemos cuáles son las más destacadas.

Plaza de los Venerables

La hostería de Laurel se trataba de una casa de gulas que sirvió a Zorrilla de inspiración para situar la obra en la plaza de los Venerables de 1545 que aunque ahora dista mucho de la actual todavía se puede disfrutar de su encanto. El edificio ahora es propiedad de la cadena valenciana Casual Hoteles que acaba de abrir sus puertas completamente tematizado. Durante el siglo XVI en el costado de la hostería se encontraba un callejón desde el que se llegaba la plaza de los Desafíos que se trataba de un lugar donde los sevillanos se retaban a muerte.

Plaza de la Alianza

En la plaza de la Alianza se puede localizar la casa de Ana de Pantoja, la esposa del persona que compite con Tenorio.

Calle de Calatrava

El convento donde ingresó Doña Inés, la mujer de la que estaba enamorado Don Juan Tenorio se encuentra en la calle Calatrava, ella pertenecía a un convento que se encontraba en aquella calle de la Orden de las Calatravas, de ahí el nombre del lugar. Actualmente, no queda rastro del convento pero ubicado en la que se llamaba entonces calle de San Benito fue la inspiración de Zorrilla durante sus viajes a Sevilla para escribir la obra.

Antigua Cárcel de Sevilla

En la esquina de la calle Sierpes con calle Bruna se encontraba la antigua cárcel de Sevilla donde en el primer acto de la obra Don Juan es prendido junto a Don Luis para ir a los calabozos después de humillar a su padre.

Instituto Murillo

En el último acto Don Juan visita el panteón familiar donde descansa Doña Inés, cuyo fantasma se le aparece. Parece ser que el cementerio se encontraba en los extramuros de Sevilla donde hoy se sitúa el Instituto Murillo, hoy se sabe por el hallazgo de viejas lápidas en el subsuelo durante las construcción del pabellón para la Exposición Iberoamericana de 1929.

También aparece en la obra otras localizaciones como la calle Génova, actual Avenida de la Constitución. La obra de Zorrilla se emplaza claramente en Sevilla donde numerosas de sus localizaciones del siglo XVI se encuentran plasmadas en la historia.