Fabricar papel al estilo de los aztecas

El taller de fabricación de papel artesanal, que se ha puesto en marcha en el Muelle de las Carabelas, en La Rábida, Huelva, enseña durante este mes las técnicas que utilizaban los aztecas y mayas en la fabricación de los códices. El responsable del taller, Alejandro Gaona, cuenta que cuando los españoles llegaron a Centroamérica encontraron un tipo de soporte con el que se hacían estos códices y en el taller tratan de reproducir ese proceso de fabricación del papel.

La primera semana la actividad se centró, concretamente, en la fabricación de papel al estilo mexicano. El proceso comienza untando aceite de girasol en una superficie de madera para luego, con la ayuda de una piedra u objeto pesado, que actúa a modo de prensa, ir dando forma a las cortezas de plantas vegetales, previamente cocidas. Las plantas cuyas cortezas son válidas para este fin son, entre otras, el ficus o la morera, además de todas aquellas plantas silvestres que el entorno natural ofrecía a los mayas y aztecas. Con este sencillo y rápido proceso, los participantes pueden llevarse un recuerdo elaborado por ellos mismos, además de adquirir el contenido cultural del procedimiento de elaboración.

La oferta de este taller se complementa con otras tres actividades que se han venido desarrollando durante el mes de julio y que continúan en agosto, como la fabricación de papel al estilo occidental, la creación de un pequeño álbum de fotos y la elaboración de tarjetas tridimensionales, todo ello en un ambiente familiar, pues en la actividad participan, a partes iguales, mayores y pequeños.

El monitor, Alejandro Gaona, tiene 13 años de experiencia en la artesanía del papel, actividad a la que se dedica profesionalmente, y de ahí su interés por estas técnicas tradicionales. Onubense de nacimiento, pretende montar su propio taller en una zona rural de la provincia y seguir dedicándose al mundo de la artesanía papelera. Cuenta que sus clientes pertenecen principalmente al mundo del arte, como pueden ser pintores o grabadores y que el papel artesanal tiene diversos fines como las tarjetas de bodas o artículos decorativos y de encuadernación.

Gaona valora muy positivamente las actividades que el taller de fabricación de papel está desarrollando, pues todas ellas están teniendo buena afluencia de público y además de participar en ellas, según detalla, explica a los visitantes cuál es la procedencia del procedimiento, para que ellos vean que cuando llegaron los españoles a América había un soporte cultural con el que estaban hechos los códices.

Tras participar en la actividad y conocer de primera mano el proceso de elaboración, todos valoran más algo tan cotidiano y que está tan presente en nuestras vidas como es el papel.

En el caso del taller de papel elaborado al estilo occidental, los niños, además de hacer su propia hoja, se animan a decorarla y hacer sus propios diseños, fomentando la creatividad de los pequeños. El monitor asegura que la gente se va muy contenta, porque no se espera el resultado: "En 15 minutos te llevas un producto que, a falta del secado, está terminado".