Mucho ha marcado y transformado nuestras vidas la pandemia, pero si algo ha modificado sustancialmente es nuestro hogar. Cuando hubo que adaptarse en pleno confinamiento al teletrabajo, a compartir estancias, a pasar más tiempo en la cocina o a respirar aire fresco en la terraza, pisos y casas mutaron en su decoración e, incluso, sufrieron obras de mejora. Reformas, en mayor o menor medida, que llegaron para quedarse y que han marcado tendencia en busca de una mayor funionalidad y comodidad. Así lo corroboran los expertos, como el interiorista sevillano Marc Escrivá, quien a diario sigue trabajando en estos "cambios que el sevillano pide" con el fin de adaptar su hogar a un espacio todoterreno.

Tras el duro confinamiento hemos aprendido que si debemos estar en casa, hay que sacarle mucho más partido a nuestras viviendas y convertirlas en lugares óptimos para pasar más tiempo de una forma agradable. Hay quien en los últimos tiempos incluso ha aprendido bricolaje, pero también se ha valorado el trabajo de profesionales como los interioristas que aconsejan cómo hacer estos cambios de una forma equilibrada y personalizada.

Saber dónde colocar un mueble o el color apropiado para un dormitorio no siempre resulta fácil. Escrivá Studio, empresa de interiorismo que lleva dos generaciones, ahora desde su estudio en Sevilla, realizando el diseño y decoración en cientos de hogares y oficinas es una de esas empresas que hace más cómoda la vivienda. "Tenemos una sólida comprensión de la relación entre el color y el patrón, el tamaño y la escala, la calidad y la artesanía, el precio y el valor, y lo estamos aplicando cada día en muchas viviendas sevillanas, así lo quieren nuestros clientes, un cambio", cuenta Marc Escrivá.

Presupuesto y la terraza, la reina de la casa

El interiorista Marc Escrivá, de Escrivá Estudio.

Los hogares sevillanos han cambiado con la pandemia, hemos aprendido a vivir y convivir es nuestras terrazas y balcones, en nuestros salones multifunción, en cocinas ahora convertidas en comedores, dormitorios adaptados también en despachos con el teletrabajo. Cualquier metro cuadrado tiene una finalidad y no puede estar baldío y, lo más importante, se le puede sacar partido. 

Para Marc Escrivá, "un interiorista consigue con su proyecto, en primer lugar, dar un enfoque profesional, trabajamos con diseños en 3D, buscamos los mejores profesionales para cada trabajo y logramos un ahorro en los materiales. También se consigue con la intervención de un interiorista que la reforma se realice más rápida, es decir, se gane tiempo y todo eso conduce al final a que el cliente ahorre dinero en la rehabilitación y a que todo esté coordinado por un interiorista con años de experiencia".

Proyectar un buen espacio exterior donde descansar, hacer deporte... aumenta la calidad de vida.

"Con la pandemia, se ha buscado a un interiorista para decorar una nueva casa o dar un nuevo aire a la que tenemos; los sevillanos hemos buscado adaptación y comodidad", explica Escrivá, que añade: "No hay un mínimo o máximo de dinero que una familia debe invertir para decorar su casa, como interiorista nos adaptamos siempre al presupuesto que tiene el cliente, se convierte en nuestra responsabilidad encajar y adaptarnos al mejor proyecto posible".

Pero no sólo se están dando grandes cambios en las casas sevillanas, los detalles más pequeños también dotan a nuestros hogares de un aire nuevo: "Estamos comprobando que los sevillanos queremos cambiar y hemos cambiado nuestras casas y la estamos adaptando tras el Covid-19, por ejemplo, la necesidad de introducir la naturaleza en nuestras casas con plantas, en el balcón, huertos en jardines o utilizando materiales naturales. Ahora nuestras terrazas son conexiones con el exterior. Hacemos deporte, leemos, comemos… Proyectar un buen exterior es ganar en calidad de vida".