Es juvenil de primer año, por lo que será de los más jóvenes en Vigo, pero la personalidad y el carácter de Curro Sánchez (3-1-96, La Palma del Condado) pueden convertirlo en el líder del equipo que defiende el título a partir del lunes.

-¿Ilusionado?

-Está claro. Nunca he podido disfrutar de un campeonato así y estoy deseando que llegue. Es defender al Sevilla en una cita muy importante y un gran escaparate.

-Y defendiendo el título...

-Nos lo han dicho, que vamos con la presión de lo que hicieron el año pasado nuestros compañeros, pero también nos han dicho que estemos tranquilos, que hay calidad para hacer las cosas bien.

-Este año además con un nivel muy fuerte. Barça y Madrid llegan como nunca y con jugadores que Curro conoce bien, compañeros de selección.

-Cualquier equipo a ese nivel será fuerte, pero es lógico que los grandes sean rivales a respetar. Algunos de los que estén son de mi edad, de primer año, y los he tratado en la selección. Son grandes futbolistas y sobre todo grandes personas. Adama Traoré (Barça) es un cañón y también estará Quinti (Xabier Quintilla, del Barça), un gran central. Luego también conozco a Yelko, del Celta.

-¿Qué sabe del Athletic, vuestro rival en octavos?

-Por ahora lo único que nos han dicho es que tienen un delantero fuerte (Iñaki Williams) y que tengamos cuidado de todo el equipo.

-Conociendo el potencial que lleva el Sevilla, ¿lo ve en la final?

-Aunque parezca que no, nosotros estamos desde el principio de la pretemporada pensando en este torneo y hemos competido todo el año para llegar aquí por lo bonito que es. Llevamos un gran equipo en el que no sólo hay once futbolistas, sino que todos están muy metidos. Lo daremos todo, pero seguro que llegamos lejos.

-La piedra más dura sería con el Barça en semifinales...

-Es de suponer que ellos ganarán su partido porque son favoritos, pero ahora mismo sólo pensamos en el Athletic. Si pasamos de ronda, ya pensaremos en ellos.

-¿Cómo califica su experiencia en la selección y en la Ronda Élite clasificatorio para el Europeo?

-Muy bonita, pero amarga por no clasificarnos. De vuelta no venía tan contento como esperaba. Pero fue muy bonito. Hay un buen ambiente, los entrenamientos son alegres y te tratan de manera inmejorable. A estos niveles es donde te das cuenta de que no se puede fallar, de que todo es muy exigente y que hay que estar concentrados. Croacia, con dos goles de estrategia, nos mandó p'allá.

-¿Es la de juvenil la etapa más bonita para un futbolista?

-Creo que sí. Hay torneos nacionales y está la Copa del Rey, que no la hay en ninguna categoría más. Yo estoy disfrutando muchísimo.

-Ha sido un buen año. Debut en la selección, en el filial y casi lo rozó en el primer equipo.

-Ése sería mi sueño, pero la verdad es que no me puedo quejar y ahora me centro en acabar esta temporada muy bien y si es ganando la Copa de Campeones, mejor.