-Parece que es el hombre de moda junto con Vitolo...

-Bien, contento, disfrutando de partidos y minutos que es lo que los jugadores queremos. Y con las ganas de seguir para continuar con momentos como el de ahora.

-¿Fue frustrante para usted que no lo citara Del Bosque?

-No, frustrante no. No es algo que dependa de mí y lo importante es trabajar bien para el club y si algún día llega la llamada no voy a negar que sería cumplir un sueño. Pero estamos en una fase definitiva en la temporada y me debo a mi club. Me alegro por Vitolo, que lo merecía y ahí está.

-Le ha dado la vuelta a la tortilla de forma espectacular.

-Sí que es verdad que empecé jugando los primeros partidos, luego tuve una lesión importante de tobillo y se especuló que iba a salir. Pero siempre creí en mí y tuve la ilusión de disputar el máximo número de partidos con este club tan importante. He trabajado con la esperanza de que llegara este momento. Estoy disfrutando, el equipo está bien y ojalá siga así.

-Mbia le quitó el sitio cuando llegó al principio de temporada y luego la Copa de África le posibilitó volver al equipo...

-En el centro del campo tenemos una competencia alta. Somos dos jugadores distintos. Estuve mes y medio con una lesión de tobillo, me lo doblé entrenando y estuve más tiempo de la cuenta. Y luego lo he disputado casi todo.

-Entonces, antes de Navidad, ¿se vio camino de Inglaterra?

-En ningún momento me he visto fuera. Cuando estuve en esa situación tuve varias conversaciones con el club, con el míster. Estábamos de acuerdo en que queríamos seguir juntos y así ha sido. Nunca perdí la esperanza ni la ilusión por vivir estos momentos. He tenido que trabajar, he tenido que hacer muchos sacrificios, y creo que ha merecido la pena. Creo que sigo en deuda con el club por el esfuerzo que hizo conmigo y por la confianza que siempre tuvo en mí.

-La primera vez que Emery lo puso como delantero fue en Lieja y le llovieron las críticas.

-Sí, no salió como esperábamos, pero sabíamos que podíamos mejorarlo. Y se está viendo que se puede hacer bien, tanto ese recurso como otros. El equipo tiene variedad, mucha competencia, una amplitud de plantilla que rinde a un nivel alto, ésas son las claves.

-Se habló de que Emery no sabía dónde encajarlo en el equipo, que no tenían 'feeling'.

-Sí, es algo que yo nunca he entendido, porque mi relación desde que llegué ha sido magnífica, no sé de dónde pudo salir que nos llevábamos mal. Yo siempre he seguido trabajando, él ha seguido confiando en mí, unas veces con más minutos, otras con menos. Yo creo que él nunca ha perdido la esperanza en mí como jugador y yo tampoco la he perdido en mí mismo. Poco a poco la hemos ido mejorando, lo que él quería que yo mejorara. Y yo trabajé lo que creía que podía mejorar. Voy a seguir trabajando para seguir puliendo.

-Usted jugó de delantero en sus inicios, ¿no?

-Sí, y debuté como delantero en Primera División con el Levante, al que llegué en edad cadete.

-Ya nadie recalca negativamente que el Sevilla tuvo que pagar su cláusula de rescisión (6 millones de euros).

-Sí, bueno, se hablaba de que había sido un fichaje demasiado caro. Quizá no fui siempre titular el primer año, pero disputé 41 partidos. Siempre estuve preparado para cuando el míster lo creyese oportuno y siempre tuve fe en tener la continuidad de ahora. Yo seguí en lo mío, con la ilusión de darle la vuelta. Creo que lo que estoy viviendo ahora es algo que me he ganado con trabajo y sacrificio.

-Y con polivalencia. Ha jugado de medio de cierre, casi de central, de mediapunta, de delantero... Le falta jugar de portero.

-Sí, si hay que jugar ahí algún partido... (risas). Todo ha ido en función de los partidos y de los rivales. El míster sabe que puede contar conmigo para la posición que sea. Voy a estar dispuesto a jugar los partidos donde él me ubique. Y voy a trabajar por dar la cara por el equipo y por él.

-Parece que se generaliza el símil con Kanoute... aunque sean jugadores tan distintos.

-(Risas) Ya dije tiempo atrás que Kanoute son palabras mayores. La comparación es por físico y llegada, creo yo. Ojalá llegase algún día a ser tan importante como lo fue él para el Sevilla.

-¿Es virtud de Emery sacarles partido a los futbolistas incluso fuera de sus posiciones?

-Sí, sabemos que es un entrenador que les ha sacado mucho partido a muchísimos jugadores. En mi caso, tanto él como yo seguimos creyendo en mí y se ha visto que con esfuerzo y dedicación están llegando los resultados.

-Su importancia se refrenda con el brazalete de capitán.

-Para mí es importante, una responsabilidad así es bonita y es un orgullo. Hay otros capitanes y otros compañeros que tienen ese carácter y ese perfil de liderazgo y que dentro y fuera del campo ejercen como tales. Si me toca ser capitán, lo luciré con mucho orgullo y responsabilidad.

-¿Se siente un líder?

-Un líder, no; me siento uno más que quiere ayudar al equipo y a los compañeros.

-Tiene dos antecedentes valencianos que fueron míticos capitanes, Javi Navarro y Palop.

-Son claros ejemplos de líderes y capitanes, gente importante que ha logrado en este club muchos títulos. Ojalá lo repitiera.

-¿Se ve levantando un título?

-Ojalá. Si fuera así sería por el bien del sevillismo. Es muy bonito ver a tanta gente orgullosa y feliz por las calles de la ciudad, eso es algo impagable. Y me gustaría por toda esa gente.

-¿Una de las claves para que sea capitán a veces es su habilidad para hablar con el árbitro?

-No lo sé. En un momento dado faltan los primeros capitanes y es el míster el que decide. Repito que intentaré ayudar en cualquier aspecto, tanto dentro como fuera.

-¿Qué es el Sevilla para usted?

-El club, la ciudad, la afición son espectaculares. Siempre me han apoyado y he tratado de responderles donde lo tenía que hacer. Para mí lo que estoy viviendo aquí es especial. Mi segundo hijo acaba de nacer aquí y espero que estar muchos años en el Sevilla.

-El hecho de que Emery lo haya designado capitán desdice la supuesta mala relación con él...

-Sí. Si nos lleváramos mal no creo que me hubiese dado esa responsabilidad. Me la ha dado y yo estoy encantado, deseando responder.

-¿Cuál es el secreto de Emery?

-El trabajo. He visto pocos entrenadores tan trabajadores como él, que lo vivan tan intensamente como él y que tengan un compromiso con el club tan alto. Es el entrenador ideal para el Sevilla. Y ojalá que lo podamos tener durante mucho tiempo. Hay que valorar lo que está haciendo.

-¿Ven más cerca la opción de clasificarse para la Champions tras el golpe en El Madrigal?

-Fue una victoria muy importante, ante un gran rival. Es una inyección de energía para seguir luchando. Primero queremos asegurar la Europa League y luego, si tenemos opciones de pelear plazas de Champions, lo haremos con toda la ilusión del mundo.

-¿Es factible la Champions?

-Nosotros somos conscientes de la dificultad, pero sabemos que es posible, que somos capaces de todo y podemos ganar muchos partidos. Vamos a ir con la ilusión de que así sea. El equipo va a luchar hasta el final por meterse entre los cuatro primeros.

-¿Cree que es lógico que el club no se plantee la Champions como una obligación?

-Yo creo que es fundamental eso. Hay que plantearlo como una ilusión, como algo extraordinario que puede venir, sin obsesionarnos con ello, y valorando que hay grandes rivales. A partir de ahí, si lo conseguimos, lo saborearemos mucho mejor.

-Parece que a la afición le sabe ya a poco la Liga Europa...

-Sí, parece que tenemos que entrar en Champions por cómo ha ido la temporada, se ve que tenemos plantilla para jugar esa competición y es normal que la gente sea exigente. Nosotros también lo somos. Pero hay que ser conscientes de la dificultad. Hay equipos con muchísimo presupuesto. Lo nuestro es todo ilusión.

-¿Cómo ha recibido el vestuario el emparejamiento con el Zenit?

-Como contra el Villarreal, con mucho respeto. Es un rival con un potencial enorme, con jugadores importantes. Ya lo analizaremos, con ilusión y con respeto.

-La otra vez que se vio el Sevilla con el Zenit en cuartos levantó la UEFA, y también jugó un partido clave el jueves de Feria.

-Sí, bueno, ojalá, ojalá se repita. Va a ser difícil, allí son muy fuertes. Pero nosotros tenemos la baza de nuestro estadio y de que somos un gran equipo. Esperemos que podamos celebrar el pase allí y disfrutemos de la Feria en San Petersburgo. Sería muy especial.

-¿Cómo le ha sentado al equipo el parón en plena buena racha?

-Nunca se sabe. Nos corta esa inercia positiva de resultados. Pero nos sirve para prepararnos física y mentalmente para el tramo final, que va a ser exigente, duro, pero bonito a la vez.