Álvarez Reyes quiere reforzar la programación del ciclo 'Nocturama'

El director del CAAC planea para la próxima edición volver a la cantidad de conciertos que había hasta el recorte impuesto por la crisis, además de poner a "dialogar" la oferta musical con las exposiciones del Centro

El músico zaragozano Bigott, el pasado miércoles, durante el último concierto del ciclo del CAAC.
El músico zaragozano Bigott, el pasado miércoles, durante el último concierto del ciclo del CAAC.
Francisco Camero / Sevilla

28 de agosto 2010 - 05:00

El drástico recorte presupuestario que ha sufrido la última edición de Nocturama, de los 160.000 euros del año pasado a los 80.000 de éste, invitaba a temer por su continuidad en un año en el que otras iniciativas consolidadas (de Espacio Iniciarte al selecto ciclo de pop-rock del Teatro Central, pasando por Rising Stars, dedicado al jazz) fueron arrasadas por la crisis y el propio CAAC vio cómo su partida anual descendía de seis millones de euros a algo menos de cinco.

"No hay para más", dijo muy claramente el director del Centro Andaluz de Arte (CAAC), Juan Antonio Álvarez Reyes, el pasado junio durante la presentación del ciclo que durante los últimos seis años ha acogido el espacio de la Cartuja. Sin embargo el propio Álvarez Reyes quiso ayer despejar las dudas. "Por supuesto que va a continuar. Ya tengo la mente puesta en la edición del año que viene. De hecho, mi intención es potenciarlo", aseguró a este periódico.

El CAAC presentó también ayer las cifras del ciclo, celebrado desde el 1 de julio hasta el pasado miércoles. Casi 7.000 espectadores acudieron durante los dos últimos meses a los 13 conciertos (cinco menos que en 2009), y alrededor de un 15% de ellos visitaron las exposiciones que alberga el Monasterio de la Cartuja. A pesar de coincidir en sus primeras jornadas con el Mundial de fútbol, señalaron desde el Centro, la media de asistentes por concierto ha sido de 500 personas, cantidad que se superó con creces en las actuaciones de Lali Puna y Bigott (en imagen de Mr Hipérbole), protagonistas de los dos conciertos con mayor entrada. Un balance "muy satisfactorio" para Álvarez Reyes, quien insistió en que, "salvo que el mundo entero se caiga con una nueva crisis mundial, y entonces nos caeríamos todos", la séptima edición de Nocturama entra en sus planes para la próxima temporada.

"Además, me gustaría que hubiera más conciertos, volver a la cantidad que se ofrecía antes. De todos modos, hay que recordarlo, luchamos mucho por que el ciclo siguiera, y yo creo que a pesar del recorte, que tuvo que hacerse por imperativos, se ha salvado dignamente", declaró. El director se reunirá próximamente con las empresas programadoras del ciclo, Green Ufos (artistas internacionales) y La Suite (nacionales), para analizar la recién concluida edición y exponerles la orientación que desea imprimir a Nocturama. "Me interesa especialmente no concebir su programación aparte de la del CAAC, que las dos dialoguen y haya relación entre los conciertos y las exposiciones del Centro. Eso es algo que para el año que viene quiero que se intensifique", avanzó Álvarez Reyes, que no descartó que haya algún cambio en el modelo vigente hasta ahora (artistas internacionales en julio y nacionales en agosto).

Por otro lado, el CAAC ultima ya sus dos próximas exposiciones, que serán presentadas a finales de mes aunque se anuncian ya en la web del centro. Son MINUCODEs, una instalación fílmica realizada en Nueva York en 1968 por la argentina Marta Minujín, interesada en las dinámicas de distintos grupos sociales ante una misma situación, y una instalación escultórica y una serie de dibujos de Curro González que bajo el título Monumento al artista proponen una reflexión sobre el concepto romántico del creador como genio.

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