Los comerciantes y vecinos han empapelado la calle Hernando Colón con carteles en lo que se exige la peatonalización de toda la vía tras las pérdidas económicas, la contaminación ambiental y la acústica que llevan sufriendo desde hace años. Desde antes de que a finales de 2007 se peatonalizara la Avenida de la Constitución, la calle pide por unanimidad que se sigan los pasos de otras tantas como Tetuán, Sierpes, San Fernando, Alameda o Asunción.

La vía cuenta con 25 comercios a día de hoy pero “todos en quiebra técnica”, comenta Manuel Ruíz, un propietario de uno de ellos. “Todos los comercios tenían de dos a tres empleados y ahora tan solo estamos los autónomos”. Los comerciantes aseguran que las pérdidas alcanzan en algunos casos los 120.000 euros, teniendo en cuenta que “algunos días no se vende nada y el alquiler en esta zona ronda los 2.000 euros”. Concretamente han sido tres los establecimientos que han tenido que cerrar por quiebra en lo que va de 2012.

El tráfico en esta calle es imprescindible como único enclave que une la plaza de la Alfalfa con García de Vinuesa y la salida hacia el Paseo de Colón, sin embargo, los afectados consideran una opción abrir el tráfico por la calle Granada hasta Méndez Núñez o por delante del Banco de España, justo antes de Hernando Colón, o incluso “cerrar el tráfico en la plaza de la Alfalfa. “Cuando el semáforo del tranvía se pone en rojo, se forma un colapso en toda la vía. Eso cuando no se convierte la calle en un circuito de fórmula uno”, indica un afectado.

Desde el Ayuntamiento, la delegada del Distrito Casco Antiguo, Amidea Navarro, dice comprender a los vecinos y comerciantes. Sin embargo, Demetrio Cabello, delegado de Movilidad, y el propio alcalde, Juan Ignacio Zoido, aún no se han atendido a sus peticiones. Los afectados aseguran seguir con la lucha y pedirán cortes de la calle a la Delegación de Gobierno.