El organigrama de la Junta de Andalucía en Sevilla, aprobado este martes en consejo de gobierno, es un reflejo de la composición de la nueva dirección provincial del PSOE. La elección de nuevos delegados provinciales deja entrever que la lealtad y el municipalismo han sido los principales criterios por los que se ha regido el Ejecutivo regional.

El hombre fuerte de la Junta en Sevilla -el único delegado provincial, pues el resto son territoriales- es desde este martes Francisco Javier Fernández Hernández, flamante representante del Gobierno andaluz en la provincia. Este utrerano de 43 años pertenece al sector afín a Susana Díaz, con quien coincidió ya en el Ayuntamiento de Sevilla en 1999, cuando fue director de área de la entonces concejal y hoy consejera de la Presidencia. En el Consistorio sevillano estuvo hasta 2007 para luego dar el salto a la estructura del Gobierno andaluz, donde en la última legislatura fue delegado provincial de Medio Ambiente. A Fernández, licenciado en Geografía e Historia por la Universidad Hispalense y experto en Alta Dirección de Instituciones Sociales por el Instituto Internacional San Telmo, se le reconoce su altura como político y su solvencia como gestor. Además, este militante de la agrupación Macarena, una de las mayores de la capital, también ha sido representante de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias.

El municipalismo es otro denominador común en los cargos nombrados este martes. Aurora Cosano, anterior delegada provincial de Empleo, repite ahora como responsable territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo. A la Junta llegó desde el mundo universitario -es profesora asociada de la Pablo de Olavide- y también con la experiencia de la Diputación de Sevilla, donde ejerció como jefa de Sección de Formación Continua. Le avala su experiencia y su afinidad con Susana Díaz, con quien comparte agrupación, Triana.

Los otros tres delegados territoriales son también representantes del municipalismo, un criterio que ha regido la composición de la nueva Ejecutiva provincial del PSOE y en el que han hecho mucho hincapié tanto Susana Díaz como el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, que también preside el partido en la provincia. Dos de ellos repiten: Francisco Gallardo, que fue alcalde de Los Corrales y que ha presidido la Mancomunidad de Municipios de la Sierra Sur durante 12 años y el Consorcio de Medio Ambiente de Estepa durante otros dos; y Francisco Díaz Morillo, que también fue alcalde de su localidad natal, Villamanrique de la Condesa durante seis años, ha trabajado en la Diputación provincial y ha presidido la Mancomunidad para la Gestión de los Residuos Sólidos del Guadalquivir durante los últimos cuatro años. Gallardo, anterior delegado de Agricultura y Pesca asume ahora, además, las competencias de Medio Ambiente. Mientras que Díaz Morillo pasa de Turismo y Comercio a Educación, Cultura y Deporte.

Continuismo, como premio a la lealtad a la Junta de Andalucía y a la dirección del partido, y alguna que otra novedad, como la incorporación de Francisca Díaz Alcaide, como delegada territorial de Salud y Bienestar, una médico de El Saucejo. Esta militante, hija de Antonio Díaz, que fue alcalde del municipio, ejercía desde 2004 como médico de familia en Villanueva de San Juan, aunque ejerce su profesión desde hace trece años, una ocupación que compagina con su responsabilidad como concejal.

La incorporación de Izquierda Unida como socio de gobierno a la estructura de la Junta en Sevilla también responde a un perfil similar: el municipalista. Así, la nueva delegada territorial de Fomento, Vivienda, Turismo y Comercio es desde ayer Granada Santos, una joven licenciada en Historia del Arte y concejal de El Viso del Alcor.