"Nuestra vida depende de la ayuda psicológica en más de un 50%". Con estas palabras, afectadas por el cáncer de mama valoran la asistencia que hasta ahora han recibido de una Unidad de Psicología en el Hospital Virgen Macarena que, este mes, dejará de funcionar. "Esta asistencia consistía en un proyecto de investigación que ya ha terminado y estos pacientes serán tratados a partir de ahora en Salud Mental", explican fuentes del Hospital Universitario.

Ante esta pérdida asistencial, cuatro pacientes han decidido crear un grupo de afectadas para reclamar al SAS las terapias psicológicas en las que se encuentran actualmente y que, según explican, aún no han terminado. "Me diagnosticaron el cáncer con 28 años y, tras una recaída, me hundí; mi psicóloga me ha dado las herramientas para vivir con esta enfermedad", explica Nieves Flores, sevillana de 31 años que ya ha tramitado su reclamación en el Hospital Macarena.

"Yo tengo cita mañana -por hoy-, ¡menos mal! porque necesito su apoyo", añade otra afectada, Carolina Diego, que tiene 31 años. A esta mujer le diagnosticaron cáncer de mama a los 29 y hace tan sólo tres meses perdió a su madre por la misma enfermedad. "Mi madre era mi pilar y ahora me siento sola", lamenta. Para estas afectadas la ayuda psicológica es "fundamental" en la lucha diaria que afrontan. "Soy joven y la enfermedad ha roto todos mis sueños; y lo que es peor, me duele ver cómo afecta a mi marido y a toda mi familia", añade Nieves Flores.

A Silvia Donadios le llegó el diagnóstico con 25 años y a sus 32 recién cumplidos reconoce que el verano pasado sintió "miedo" por primera vez. "Estoy aquí gracias a Nuria Blanco, mi psicóloga, ella me ha ayudado a seguir adelante", explica. Silvia Sánchez tiene 38 años y hace un año terminó el tratamiento de quimioterapia y radioterapia. "Caí en una depresión, desde octubre comencé la terapia con la psicóloga, ella me ha ayudado a afrontar una situación muy dura".

Estas mujeres están decididas a realizar acciones, como recogida de firmas o manifestaciones, para pedir que se mantenga la asistencia psicológica. "Lo haremos por nosotras, que estamos en tratamiento, y por las nuevas que llegan y que lo necesitan", asevera Nieves. "Todas nosotras somos jóvenes y la enfermedad ha roto nuestras vidas; además de la quimioterapia y de la radioterapia, necesitamos esta asistencia psicológica", insistieron ayer estas afectadas, en el Día Mundial Contra el Cáncer.

Los permanentes recortes en Sanidad han generado una preocupación más en las plantas de Oncología y en los Hospitales de Día, donde enfermos y familiares temen por las demoras o las posibles dificultades de acceso a los tratamientos.

El Hospital Virgen Macarena explicó ayer que todos los tratamientos se están administrando sin problemas ni retrasos. No obstante, varias pacientes que han superado la enfermedad pero que requieren terapias, como pacientes crónicas, ya han denunciado situaciones en las que las enfermeras carecían de gasas esterilizadas para curar heridas provocadas por la administración continuada de fármacos. También denuncian esperas que hace tres meses no tenían que soportar. Mientras esta preocupación crece en las salas de espera del Macarena, fuentes hospitalarias insisten en que las terapias en Oncología se administran con normalidad.

Entre las carencias detectadas en esta asistencia por el sindicato de Enfermería-Satse se encuentra la ausencia del personal administrativo que atiende a las pacientes, labor que han asumido las enfermeras que administran la quimioterapia y otros tratamientos.

En otro punto del Servicio Andaluz de Salud dedicado a la lucha contra el cáncer, el Hospital de Día del Virgen del Rocío, el problema se concentra en la saturación de pacientes por la falta de personal. "Los avances en la lucha contra esta enfermedad han permitido elevar la supervivencia al cáncer. Muchos enfermos son tratados de manera ambulatoria, en los Hospitales de Día, sin necesidad del ingreso hospitalario", recuerda Reyes Zabala, portavoz del sindicato de enfermería Satse-Sevilla. Este "logro requiere dotación suficiente de personal y de instalaciones", añade. El Hospital de Día del Virgen del Rocío cuenta con 28 sillones y cinco camas donde los pacientes reciben los tratamientos. "La dotación de enfermería en este hospital es insuficiente", denuncia Zabala, al precisar que todos los pacientes que llegan a este punto asistencial son atendidos sólo por cinco enfermeras, en el horario de mañana; y por cuatro, en el horario de tarde. El aumento de la prevalencia y de la incidencia de los tumores ha provocado que, en pocos años, este Hospital de Día, se haya quedado "pequeño", denuncia la portavoz de las enfermeras.

Otra de las reivindicaciones de padres se localiza en el Hospital Infantil, donde la asociación Andex ha destinado fondos donados de manera altruista para la construcción de un nuevo Hospital de Día cuyas obras terminaron en noviembre. Desde hace tres meses estas instalaciones permanecen cerradas y sin fecha prevista de inauguración.

Los recortes alcanzan también a las plantas de Oncología por el recorte del salario y de la jornada eventual de los especialistas eventuales. El Hospital Infantil del Virgen del Rocío cuenta con cinco oncólogos especializados en niños y dos de ellos son eventuales, de modo que desde octubre trabajan al 75%. Estos profesionales tienen una experiencia acumulada en el SAS entre tres y siete años. Los recortes así como las dificultades que afrontan han llevado a especialistas en Oncología a buscar un futuro mejor en la sanidad privada o en el extranjero. Los afectados por el cáncer y sus familiares exigieron ayer, en el Día Mundial contra el Cáncer, que los recortes no mermen la asistencia que necesitan.