Un coche gira a la derecha en Sánchez Perrier desde la ronda histórica. Desde las ocho de la mañana de ayer este giro está prohibido. Para descargo del conductor la señal apenas se ve y no hay ni un policía local que explique que esta es una de las ocho calles afectadas por la reordenación del tráfico en el tramo entre la Resolana y la Carretera de Carmona. Sánchez Perrier sólo puede ser transitada ya por los coches que se dirigen desde Fray Isidoro de Sevilla hacia la Ronda y no al revés, como se mantuvo durante los últimos treinta años.

El coche sigue adelante en contramano y llega hasta una intersección. Ahí el conductor se da cuenta de que circula de manera incorrecta porque ve otro vehículo venir de frente y descubre otra placa semioculta tras un contenedor de reciclaje de papel. El conductor deja pasar al coche y sigue adelante hasta Fray Isidoro de Sevilla, siempre en dirección prohibida. No pasa nada porque ambos circulan a una velocidad moderada y apenas hay tráfico, ya que el incidente se produce a mediodía de una mañana de agosto.

El semáforo de Sánchez Perrier ya indica una flecha verde de giro obligatorio a la izquierda, hacia el sentido único de la Ronda. Una señal vertical acompaña al semáforo prohibiendo el giro a la derecha con la leyenda "excepto taxis" debajo. Llega un turismo y marca con el intermitente que va a hacer el giro prohibido. El conductor ve a un fotógrafo de prensa listo para captar la maniobra irregular, baja la ventanilla y pregunta. "¿Qué está prohibido girar? Pero eso es a partir del domingo, ¿no?". "No, ya desde hoy a las siete de la mañana". "Ah, ¿sí? Bueno, yo voy a girar igual, no voy a dar toda la vuelta. Bórrame la matrícula si me tiras la foto, no me vayan a multar luego". El semáforo se enciende y el coche gira, en efecto, hacia la Resolana.

La costumbre parece imponerse a las señales. Igual ocurre en Don Fadrique, la calle que llega desde la parte trasera del Hospital Macarena hasta la Resolana junto al Parlamento de Andalucía. Antes era de doble sentido y ahora sólo podrá ser utilizada por los conductores que entran en la Ronda, además del contracarril reservado para autobuses y taxis, que sí podrán circular en ambas direcciones. Esta calle, sin embargo, tiene menos problemas que Sánchez Perrier por dos razones. La primera porque es bastante más ancha y la segunda porque hay una dotación importante de la Policía Local en el cruce porque minutos antes el concejal de Movilidad, Francisco Fernández, ha visitado la zona.

Además de Sánchez Perrier y Don Fadrique, la reordenación de la ronda histórica ha obligado a modificar el sentido de las calles La María, que queda sólo de entrada a la Ronda; León XIII, que antes era doble sentido y ahora sólo queda de entrada; Antonio Pantión, por la que solo pueden pasar los coches que se dirijan hacia la calle Florencio Quintero; Perafán de Ribera, también de entrada; Dionisio Alcalá Galiano, donde una parte de la calle se mantiene en el mismo sentido y la otra se cambia hacia León XIII; y Torrijiano, de entrada.

Mientras tanto, un grupo de operarios colocan los separadores a lo largo de la Ronda y terminan de conectar los nuevos semáforos. Uno de ellos está situado junto a la gasolinera de Capuchinos. El carril que queda libre, todavía en el sentido que se eliminará el próximo domingo, está atascado. "Si ya hay atasco hoy, imagínate cuando pongan de verdad el sentido único", comenta alguien que espera para cruzar en un semáforo. "Pues cuando vayan los niños al colegio, ya verás...", responde otro. El paso de peatones todavía no está pintado sobre el nuevo asfalto. Las señales están cubiertas con un plástico negro. Tampoco el carril bici está señalizado y permanece cortado en las intersecciones de la Ronda. Todo a la espera del domingo.