Ya lo intentó en verano, en una de las múltiples tentativas de Óscar Arias para intentar reforzar la delantera, ya fichado Muriel. Y ahora volverá a intentarlo. El Sevilla ha reabierto la vía de Michy Batshuayi. El fornido delantero necesita minutos para hacerse un hueco en la lista de Bélgica para el Mundial y en el Chelsea no los tiene. Y por ahí ha visto el Sevilla el resquicio para intentar acometer de nuevo una operación que se le hizo imposible ante el interés que puso Antonio Conte en verano en tenerlo en la plantilla del equipo azulón. Pero la realidad es que a estas alturas sólo ha jugado 11 partidos de la Premier League.

Batshuayi tiene por delante a Morata o incluso Pedro en el Chelsea y, a sus 24 años, necesita más continuidad para no quedarse varado en un año de Mundial. Conte así lo ha reconocido en Londres, aunque también ha solicitado que si sale, como ve natural, necesitará otro repuesto. "Tenemos una plantilla corta", ha dicho el italiano, que podría tener hilo directo con su compatriota Vincenzo Montella. La realidad es que Batshuayi (1,85 metros) encaja en el perfil de potencia para el ataque sevillista y que sólo ha jugado 263 minutos en la Premier, marcando dos goles. También hizo otros dos en la Champions, uno el del triunfo sobre el Atlético en el Metropolitano.

No será fácil, porque tiene otros pretendientes, dada su calidad. Pero el Sevilla lo va a intentar, siempre por la vía de la cesión. Si lograra su préstamo, sería el segundo refuerzo invernal, tras el de Guilherme Arana, que llega Sevilla, una vez resueltos los problemas con el visado laboral que le impedían ejercitarse aquí.