A estas alturas y conociendo la seriedad de la pandemia y las medidas de distanciamiento social que son la principal arma de prevención, la noticia sería no ya que se suspenda una feria en Sevilla, sino que algún pueblo se decidiera a celebrarla. Pese a todo, tomar la decisión y comunicarla sigue siendo un trago amargo para los responsables municipales. Porque, más allá del disfrute, estas fiestas son un revulsivo para las economías locales.

La ola de suspensiones ha llegado ya a dos de las grandes ferias del Aljarafe y que se celebran en septiembre: la de Camas y la de Coria del Río.

Según el alcalde de Camas, Rafael Recio, la decisión se ha comunicado tras consultar con el colectivo de caseteros. Se hace ahora, sin esperar más, porque el montaje conlleva gastos, trámites y licitaciones que arrancan tres meses antes. Para el edil, era la decisión lógica dadas "las incertidumbres que hay con la pandemia a corto y medio plazo" y la prioridad de garantizar la seguridad de los vecinos.

Como alternativa, el Ayuntamiento de Camas ha dejado la puerta abierta a que se pueda celebrar algún tipo de evento, probablemente en la Plaza del Ayuntamiento, coincidiendo con las fechas de las fiestas patronales por la Virgen de los Dolores, a mediados de septiembre, en el que se pueda propiciar el encuentro entre los vecinos y ayudar al comercio local.

Se está estudiando. Recio señala, en cualquier caso, que garantizarán las medidas de prevención que estén fijadas para ese momento y que se trataría de un evento de uno o dos días.

El presupuesto reservado para la feria que no se use irá a un "fondo de contingencia" para poner en marcha otras medidas para responder a esta crisis económica, cuyo destino se analizará en una mesa específica, en la que Recio quiere que estén todos los grupos políticos.

También ha comunicado la suspensón de su feria de septiembre el Ayuntamiento de Coria del Río. Es la segunda vez que ocurre en una década. En 2012 tampoco se celebró, por la situación de crisis económica y la falta de liquidez del propio Ayuntamiento. Pero se recuperó al año siguiente.

"No podemos asegurar unas condiciones óptimas para celebrar una de nuestras fiestas grandes, por el riesgo que puede supone para la salud de nuestra ciudadanía y visitantes", destaca el comunicado municipal, en el que se da cuenta de un acuerdo que se tomó con unanimidad en la Comisión Municipal de Seguimiento del Estado de Alarma.

El Ayuntamiento también asegura que trabajará para "ofrecer alternativas" al comercio local por los ingresos que no van a tener. Según el alcalde, Modesto González, se está trabajando en ellas y puede que a lo largo de esta misma semana estén más "definidas".

Burguillos también suspende la suya

Más allá del Aljarafe, el martes también se comunicó la suspensión de la Feria de Burguillos, por la "dificultad" de celebrar actos mutitudinarios, por muy bien que se vayan sucediendo las distintas fases de la desescalada.

Desde el áreea de Festejos se subraya que, como ha ocurrido con el resto de los casos, los presidentes de las casetas han "entendido" las circunstancias y la decisión, pese a todo "dolorosa".

Estas suspensiones se unen a otras muchas ya confirmadas, de ferias grandes y pequeños municipios de toda la provincia de Sevilla.

En Los Palacios se han suspendido las de las pedanías y no se descarta que se vaya a hacer lo mismo con la de septiembre. Pero también se ha anunciado un programa de actividades culturales como alternativa en plazas y espacios abiertos en los que se puedan aunar con garantías ocio y seguridad.